Aunque en el mercado hay un sinnúmero de productos alrededor del colágeno —una proteína que, entre otras, da firmeza y elasticidad a la piel—, lo cierto es que algunos alimentos y semillas ayudan a producirlo de manera natural.
La piña, por ejemplo, es una de las frutas sugeridas para quienes están en busca de colágeno, pero no es la única. Portales especializados en vida moderna, como Panorama, exponen los beneficios que trae el consumo de semillas de lino (linaza), calabaza y de chía.
A continuación, algunas recomendaciones para quienes buscan cuidar de la piel a partir del colágeno:
La piña combate los radicales libres que afectan la piel
Una de las razones por las que la piña es recomendada para quienes se preocupan por su piel es la riqueza de vitamina C. Eso fue lo que explicó la dermatóloga Audrey Kunin a Allure, en conversación con la revista Vogue Latinoamérica.
“La vitamina C ayuda a combatir el daño de los radicales libres, apoya la producción de colágeno y la enzima bromelina”, explicó.
Los radicales libres a los que hizo referencia la experta son moléculas que atacan tanto el colágeno como la elastina, compuestos necesarios para que la piel luzca firme y sus arrugas. De ahí la importancia de vitaminas que contrarresten su efecto.
La piña, entre otras, es rica en vitamina D, necesaria para prevenir el envejecimiento prematuro de la piel y recomendada para quienes sufren de acné, debido a sus propiedades inflamatorias. Esta vitamina además es exfoliante, por lo que es clave para retirar las impurezas del rostro.
Eso sí, tenga en cuenta que no es recomendable para cualquiera. Si su tipo de piel es seca o sensible, puede sufrir irritaciones al contacto con la piña, o con productos cosméticos a base de ella. Las personas con este tipo de piel deben mezclar tales productos como suero de ácido hialurónico, para evitar la descamación.
Tres semillas que ayudan a producir colágeno
El portal Panorama, especializado en temas de vida moderna, dio cuáles semillas pueden ayudar bien sea prevenir las arrugas o rejuvenecerla, debido a su funcionamiento como productoras naturales de colágeno.
La semilla de lino o linaza es una de las recomendadas para cuidar la salud de la piel. ¿Por qué? “Porque contienen fibra, vitaminas, minerales, proteínas, grasas vegetales saludables y antioxidantes que ayudan a prevenir el daño celular”, de acuerdo con Medline, un servicio de información en línea provisto por la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
Entre las bondades de la semilla de lino o linaza también sobresale el omega 3 y omega 6, encargados de robustecer la barrera natural de la piel.
Otra sugerencia para evitar las arrugas es consumir semillas de calabaza. De acuerdo con el portal Mejor con Salud, la calabaza y sus semillas son alimentos ricos en vitaminas C y E, además de nutrientes como el ácido linoleico (omega-6), ácido linolénico (ácido graso omega-3), carotenoides (antioxidantes), zinc, magnesio y potasio.
Entre otras, las semillas de calabaza mejoran la apariencia de las manchas, inhibe los daños provocados por los radicales libres y previene la aparición de las manchas. Así mismo, estimula la producción de colágeno en la piel y la hidrata
La última de las tres semillas que pueden contribuir con la prevención de las arrugas es la de Chía. Su alto contenido de ácido linolénico omega-3 y antioxidantes naturales, hacen además que sea efectiva para disminuir el riesgo de algunas enfermedades de tipo cardiovascular, reducir la glucemia postprandial, es decir, el nivel de glucosa en la sangre después de las comidas y prevenir la dislipidemia, es decir los trastornos relacionados con el colesterol.