Todos los seres humanos tienen frustraciones, alegrías, tristezas y otros sin número de episodios que marcan su vida, pero la diferencia entre unos y otros es que hay quienes deciden soltar su pasado y seguir; mientras que algunos lo abrazan tan fuerte que no los deja avanzar, ¿por qué?
De acuerdo con Psicología-online, no se puede olvidar por completo un mal recuerdo o una mala vivencia, pero sí soltarla, es decir, reconociendo cada una de las emociones vividas sin señalar a un culpable. Incluso pedir perdón hace parte de la libertad que provoca la verdad y la sanidad para evitar que nazcan raíces de amargura.
Asimismo, manifiesta que una actividad que se puede hacer para superar el pasado, y por ende, un recuerdo negativo, es expresar los sentimientos que se experimentan a una persona de confianza que ofrezca una perspectiva distinta a lo sucedido.
¿Qué hacer para olvidar un mal recuerdo?
Es entonces que no solo basta con hablar de lo sucedido o dejar de juzgar, sino también perdonar, a cada uno de los involucrados, ya sean cercanos o lejanos que guardan relación con un trabajo, la familia o una amistad. Incluso es importante perdonarse asimismo por haber tomado las decisiones que, quizá, no fueron las correctas y que incluso pudieron afectar lo que en su momento fue un presente y hasta un futuro.
Para esto es importante considerar si se necesita o no del acompañamiento de un experto, aunque la etapa del perdón es individual. Todo con el fin de ser libre de esas angustias o tristezas que se aferran al pasado y crean una sensación de estancamiento.
Además, el sitio web citado menciona que es importante enfocar los pensamientos actuales que solo apuntan al pasado y a un mal recuerdo e intentar redireccionarlos a un crecimiento personal e incluso a fomentar una mejoría en las relaciones con seres queridos, considerando que los pensamientos negativos no son saludables ni productivos para el presente.
De hecho, señala que una vez se redireccione la vida se empieza a sembrar con pensamientos y emociones positivas, lo que dan un equilibrio para dejar a un lado un mal recuerdo, que más que olvidarlo deja de traer sensaciones de dolor sin desconocer lo fue y significó.
Adicional a ello, tanto los procesos como las sanidades emocionales toman su tiempo, es decir, son proporcionales a cada persona, porque influyen muchos factores para ello, por lo cual el portal especializado en psicología insta a tomar su tiempo para soltar el pasado y seguir adelante, concluyendo que cada persona vive su proceso a un ritmo distinto que otra.
Por su parte, Mente Maravillosa cita un estudio publicado en la revista Nature Neuroscience en el año 2015, donde a través de una resonancia magnética a un grupo de voluntarios, los expertos determinaron que cada persona es responsable de controlar cada recuerdo, siendo partícipes la mente y el cerbero porque eligen con que se quedan y que sueltan.
Por consiguiente, manifiesta que para olvidar un mal recuerdo se debe reconocer cada aprendizaje como una enseñanza de vida, y la forma más práctica para hacerlo es escribiendo, considerando que esta actividad es terapéutica porque le da un sentido simbólico de libertad a un pasado doloroso.
Finalmente, como se señaló anteriormente, la ayuda de un profesional es ideal para soltar dicho pasado, pero también existen prácticas como el mindfulness, que puede ser ideal para el reconocimiento de cada vivencia porque se basa en la meditación, explica el portal especializado en psicología. Sin embargo, cada persona cuenta con creencias que le pueden ayudar a superar esas experiencias.