La Semana Santa es la época en la que el consumo de pescado aumenta vertiginosamente, por estar relacionado con las costumbres religiosas más profundas del mundo católico. Sin embargo, en el momento en el cual usted decide comprar este tipo de alimento, tiene que aprender a identificar si está en buen estado y sobre todo, no comprar el pescado en un sitio que no tenga en cuenta las condiciones de higiene y conservación adecuadas.
Durante la Cuaresma, se come pescado en lugar de carne en muchos lugares del mundo católico como una práctica de abstinencia. Esta tradición tiene sus raíces en la observancia de la penitencia y la preparación espiritual para la celebración de la Pascua.
¿Qué pasa cuando un pescado no se encuentra en buen estado?
Son muchos los nutrientes que puede aportar este alimento, pero al encontrarse en mal estado puede ser la causa de varias enfermedades que afectan el buen funcionamiento del organismo.
De acuerdo con la Universidad ECCI, el consumo de pescado en mal estado puede tener serias repercusiones para la salud, dado que puede contener bacterias, toxinas o parásitos que pueden provocar intoxicaciones alimentarias.
“Los síntomas de una intoxicación por el consumo de pescado en mal estado pueden abarcar náuseas, vómitos, diarrea, fiebre y dolores abdominales. En casos extremos, pueden surgir complicaciones más graves. Por tanto, ante la aparición de cualquiera de estos síntomas, es imprescindible buscar atención médica de inmediato, asegura la entidad en mención.
Consejos antes de comprar pescado
Antes de comprar un pescado, debe mirar que se encuentre en las condiciones adecuadas para su consumo y así podrá disfrutar de deliciosos platos al lado de sus seres queridos.
Evite comprar pescado y sus derivados en ventas ambulantes, por el contrario, adquiéralo en lugares certificados donde se garantice la cadena de frío para su conservación
De acuerdo la portal rcnradio.com, estos son los aspectos que hay que tener en cuenta antes de comprar un pescado, para saber que sí está en buen estado:
- Observe los ojos del pescado:
Los ojos del pescado deben ser brillantes y prominentes. No compre pescados cuyos ojos aparecer hundidos, nublados o descoloridos, pues podrían no ser frescos.
- Olor fresco
El pescado fresco tiene un olor ligero y marino. Si percibe un olor fuerte, como a amoniaco, es una señal de que no se encuentra en buen estado.
- Piel brillante:
La piel del pescado fresco debe ser brillante y adherirse firmemente a la carne. Si la piel es opaca y se desprende con bastante facilidad es señal de que el pescado no está fresco.
- Textura firme:
Al presionar ligeramente el pescado, este debe recuperar su forma rápidamente. Evite aquellos que dejen una marca profunda o que se sientan blandos, ya que estos podrían indicar que no están frescos.
De esta manera, muchos colombianos podrán seguir manteniendo la tradición de comer pescado en vez de carne durante esta semana sin preocupaciones. De hecho, según el Ministerio de Agricultura, se estima un consumo de 47.000 toneladas de esta alimento durante la Semana Mayor, 6% más que el año anterior.