La salud nunca es un juego y, con el objetivo de prevenir eventuales complicaciones, es de vital importancia aprender a reconocer los síntomas o señales de alarma que envía el cuerpo cuando algo no está bien. Identificarlas oportunamente permite aumentar las probabilidades de éxito durante un tratamiento médico.
Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada la práctica e investigación médica, reseña en su página web que incluso síntomas como la pérdida de peso sin causa aparente pueden ser una razón suficiente para acudir al médico. Otros síntomas de cuidado incluyen dolor de pecho, pérdida repentina de la visión o el habla y dolor estomacal severo.
Con el propósito de ilustrar a las personas sobre señales aparentemente normales que en realidad no lo son, el citado portal recoge siete síntomas que podrían ser indicador de un problema grave de salud.
1. Pérdida de peso sin razón
Si bien en cierto que muchas personas están en una constante búsqueda por adelgazar, la pérdida de peso no siempre representa una buena noticia. En casos en que esta surge sin una razón aparente (dieta o ejercicio, por ejemplo), puede ser indicador de que algo no está bien.
“La pérdida de peso sin causa aparente puede ser ocasionada por muchas afecciones. Entre ellas se encuentran tiroides hiperactiva (hipertiroidismo), diabetes, depresión, enfermedad hepática, cáncer o trastornos que interfieren con la forma en que el cuerpo absorbe los nutrientes (trastornos de malabsorción)”, precisa Mayo Clinic.
2. Fiebre persistente o alta
La fiebre es un síntoma común y puede presentarse a partir de varias afecciones. Sin embargo, controlar la temperatura corporal es clave para evitar complicaciones de salud. En caso de que alcance los 39,4 °C, es imperativo acudir a un doctor.
3. Falta de aire o aliento
Esta sensación puede surgir a raíz del ejercicio exigente, la obesidad, temperaturas extremas y estar a una gran altitud. No obstante, si el síntoma aparece y no corresponde a ninguno de estos casos, vale la pena prestar atención, pues podría estar alertando sobre un problema complejo de salud.
“Entre las causas de la falta de aliento se encuentran la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, la bronquitis, el asma, la neumonía y un coágulo de sangre en el pulmón (embolia pulmonar). Otras causas pueden ser problemas cardíacos y pulmonares. La dificultad para respirar también puede ocurrir en caso de un ataque de pánico, un episodio repentino de intensa ansiedad que desencadena graves reacciones físicas cuando no existe un peligro real ni una causa aparente”, detalla Mayo Clinic.
4. Cambios inexplicables en los hábitos intestinales
Los cambios inexplicables son otro síntoma que no debe pasar desapercibido. Las señales más comunes incluyen: heces con sangre, oscuras o alquitranadas, diarrea persistente o estreñimiento y dolor de estómago que no desaparece.
El riesgo radica en que los cambios en los hábitos intestinales podrían ser signo de una infección bacteriana o una infección viral o parasitaria. Otras posibles causas incluyen enfermedad del intestino irritable y cáncer de colon.
5. Confusión o cambios en la personalidad
Si el individuo experimenta dificultada para concentrarse, percibe que sus habilidades de pensamiento son deficientes y atraviesa por cambios de conducta, ignorarlos sería un grave error. “Estos cambios pueden causarse por varios problemas, como infecciones, deshidratación, mala nutrición, enfermedades mentales o drogas”, sintetiza la fuente consultada.
6. Sensación de saciedad después de comer muy poco
Para sentirse llenos hay que comer lo suficiente, sin embargo, si esta sensación se da pese a haber comido poco o nada, algo podría estar mal dentro del organismo. Dentro de las posibles causas figuran la enfermedad por reflujo gastroesofágico y las úlceras pépticas. De hecho, en los casos más graves puede tratarse cáncer de estómago.
7. Destellos de luz
Finalmente, Mayo Clinic menciona que las luces brillantes o destellos de luz pueden representar un signo asociado a la migraña. Sin embargo, esta no es la única causa y existen otras aún más complejas.
“Los destellos de luz repentinos pueden ser un signo de una afección grave en la cual una fina capa de tejido en la parte posterior del ojo se desprende de su posición normal (desprendimiento de retina)”, concluye.
Vale mencionar que presentar los signos descritos previamente no aseguran que la persona padezca una enfermedad grave, sino que configuran una guía para identificar posibles alteraciones oportunamente. En ese orden de ideas, la valoración médica es vital.