La congestión del pecho es uno de los síntomas más comunes de la gripa o de los resfriados. Esto se debe a la acumulación de fluidos y mucosidades en los pulmones. En algunas personas puede dificultar la respiración o puede causar un dolor en el pecho, según explica el portal Mejor con Salud.

Las flemas son uno de los tipos de mucosidad que se acumulan en los pulmones. Suelen aparecer cuando las personas tienen alguna enfermedad (gripa, por ejemplo) o cuando presentan una afección médica prolongada. Por lo general, se cree que las flemas son algo malo para el organismo, pero no en todos los casos esta mucosidad se ve como algo negativo, pues existen capas de mucosidad encargadas de proteger ciertas áreas del cuerpo, ayudando a que no se sequen y a que las protejan contra virus y bacterias.

La congestión del pecho puede causar un silbido al respirar. Asimismo, “la inflamación o el estrechamiento de las vías respiratorias en cualquier ubicación, desde la garganta hacia los pulmones”, señala Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la investigación y la educación.

En esa misma línea, otra de las causas más comunes del silbido al respirar son el asma y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica. De acuerdo con Mayo Clinic, estas afecciones provocan estrechamientos en las pequeñas vías respiratorias de los pulmones, generando el sonido particular de un silbido.

De igual manera, la gripa, las flemas, el asma y cualquier inflamación de la garganta o las vías respiratorias puede provocar un silbido al respirar. Respecto a esto se debe consultar a un médico para verificar la causa y evitar que tenga mayores complicaciones en el sistema respiratorio y en la calidad de vida de los pacientes. En algunos casos, puede deberse a una reacción alérgica de algo que se haya inhalado.

Para disminuir este silbido lo primero que se debe hacer es visitar un centro médico para conocer el tratamiento adecuado. Además de esto, se pueden realizar tratamientos naturales que complementen la intervención médica. Existen varios remedios caseros que se pueden preparar de forma rápida y sencilla. El portal Mejor con Salud señala las instrucciones para hacerlos.

Cebolla y miel

Ingredientes

  • ½ cebolla
  • Ocho cucharadas de miel (200 g)

Preparación

  1. Picar la cebolla en rebanadas muy pequeñas-
  1. En un recipiente agregar la cebolla y cubrirlas con la miel.
  1. Dejarlas reposar durante diez a doce horas.
  1. Al día siguiente, quitar los grumos o restos de la cebolla.
  1. De este remedio se deben tomar tres o cuatro cucharadas diarias.

Limón

Ingredientes

  • El zumo de ½ limón
  • Una taza de agua (250 ml)
  • Una cucharada de miel (25 g)

Preparación

  1. Poner a hervir una taza de agua.
  1. Cuando esté en el punto de ebullición, apagar el fuego.
  1. Servir y añadir el zumo de limón.
  1. Agregar la miel para endulzar.
  1. Este es un gran remedio para aliviar la congestión del pecho, lo cual mejorará la respiración y aliviará el silbido al respirar. Esta bebida se debe ingerir al momento de levantarse y en la noche, al momento de acostarse.

Vapor

El portal especializado en salud Medical News Today destaca el uso del vapor para descongestionar las vías respiratorias y aliviar el silbido al respirar. Para este remedio se pueden elegir dos alternativas. La primera es tomar un baño de agua caliente y la segunda, inhalar el vapor de una taza.

Para la segunda opción se debe poner a hervir agua. Luego, en un lugar seguro, ubicar el recipiente con el agua. Usar una toalla en la cabeza para contener el vapor. Inclinarse sobre la olla de agua, con mucho cuidado, e inhalar profundamente el vapor. Esto se debe hacer durante al menos 15 o 20 minutos. El portal señala que es importante realizar pequeñas pausas para tomar un vaso de agua y así evitar la deshidratación.