Una buena circulación ayuda al cuerpo a mantenerse sano y, en especial, al sistema cardiovascular, que depende en su mayoría de este proceso. Este sistema se encarga de distribuir el oxígeno y llevar nutrientes a las células del cuerpo, eliminando los desechos y las toxinas, por lo que entre mejor se encuentre, mejor salud vascular tendrá el cuerpo.
No todas las personas conocen los síntomas de tener mala circulación sanguínea y solo lo notan hasta que empiezan a sentir enfermo su cuerpo. Según el medio, Medical News Today, el buen funcionamiento del sistema circulatorio determina qué tan bien circula la sangre a través del cuerpo y si no se revisan los síntomas a tiempo, la salud se vería afectada, ya que estos daños pueden convertirse en enfermedades crónicas.
Las personas con hábitos de vida sedentarios, gente con obesidad, aquellos que tienen una mala nutrición diaria, personas que sufren hipertensión arterial, fumadores y mujeres embarazadas son las más propensas a tener una mala circulación.
Si el flujo sanguíneo se reduce en determinada zona del cuerpo, es posible que se experimenten señales y síntomas de mala circulación.
Los siguientes ocurren principalmente en los brazos y piernas:
- Punzadas
- Picazón
- Entumecimiento
- Hormigueo
- Calambres
- Dolor
- Calor o frío en el área
- Hinchazón
De acuerdo con el medio, si una persona experimenta los síntomas de mala circulación sanguínea, es importante que hable con un médico, pues es la persona idónea para diagnosticar cuál sería el problema y, asimismo, sugerir el tratamiento para cualquier condición subyacente.
Es importante resaltar que tener una circulación deficiente puede ser un síntoma de otras condiciones de salud que ya tenga el cuerpo y que pueden estar afectando indirectamente este proceso, al punto de llevar el cuerpo a un límite en el que tenga que tratarse con un tipo de dieta o cuidados extra. Estas condiciones pueden ser:
- Obesidad
- Enfermedades que afectan las arterias o venas
- Diabetes mellitus
- Enfermedades cardíacas
Pasos para mejorar la circulación
1. Mantener un peso saludable
Según el portal experto, mantener un peso saludable promueve la buena circulación, teniendo en cuenta que el sobrepeso es una de las enfermedades que más afectan negativamente la circulación de las personas, ya que aumenta la creación de adiponectina, una proteína que está asociada con la función vascular.
2. Practicar deporte de cardio
El ejercicio cardiovascular practicado con regularidad mejora la circulación. Trotar, correr o practicar bicicleta son los ejercicios más recomendados por los expertos, porque el cuerpo mejora la capacidad de tomar y usar el oxígeno. Además, esto mejora la capacidad de dilatación de los vasos sanguíneos, lo que ayuda a que el cuerpo funcione con más eficiencia.
3. Practicar yoga
El yoga es un ejercicio de bajo impacto que puede ser practicado por todo tipo de persona. Los movimientos que se imprimen en esta práctica ayudan a mejorar la circulación al comprimir y descomprimir las venas. Según un artículo publicado en European Journal of Preventive Cardiology, el yoga es uno de los ejercicios más beneficiosos para el sistema cardiovascular y el metabolismo.
4. Beber té
El té es una bebida rica en antioxidantes, que promueven la salud del corazón y el sistema cardiovascular, además, puede mejorar la circulación. A pesar de que todos resultan ser buenos para la salud, los que más aportes brindan a este sistema son el té verde y el té negro. Según la revista médica Circulation, el té negro mejora la salud de los vasos sanguíneos; además, se mencionó que el consumo del té verde está relacionado con una tasa más baja de enfermedad de la arteria coronaria.