El pie plano es una afección común, en la que los arcos de la parte interna del pie se aplanan cuando se ejerce presión sobre ellos, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Asimismo, en su portal agregó que la mayoría de las personas no presenta síntomas asociados con el pie plano. Sin embargo, algunas personas sufren dolor de pie, en especial en el talón o en la zona del arco y el dolor puede empeorar con la actividad y, también puede producirse hinchazón a lo largo de la parte interna del tobillo.
Además, explicó que entre los factores que pueden aumentar el riesgo de padecer pie plano se incluyen los siguientes:
- Obesidad.
- Lesión en el pie o el tobillo.
- Artritis reumatoide.
- Envejecimiento.
- Diabetes.
Respecto al tratamiento, señaló que cuando el dolor es leve se puede intentar lo siguiente:
- Reposo. Evitar las actividades que puedan empeorar la afección y participa en actividades de bajo impacto, como caminar, andar en bicicleta o nadar, en lugar de saltar y correr.
- Plantillas ortopédicas. Las plantillas ortopédicas que se pueden comprar sin receta médica podrían dar mayor comodidad.
- Medicamentos. Los analgésicos disponibles sin receta médica, como el ibuprofeno (Advil, Motrin IB y otros) y el naproxeno sódico (Aleve), pueden ayudar.
No obstante, cuando el pie plano doloroso, el proveedor de atención médica puede sugerir lo siguiente:
- Plantillas ortopédicas (dispositivos ortopédicos). Las plantillas ortopédicas de venta libre pueden ayudar a aliviar el dolor que causa el pie plano. A veces, se recomiendan las plantillas ortopédicas diseñadas a medida que se moldean según el contorno del pie. Las plantillas ortopédicas no curan el pie plano, pero suelen reducir los síntomas.
- Ejercicios de estiramiento. Algunas personas con pie plano también tienen el tendón de Aquiles acortado. Los ejercicios para estirar este tendón pueden ayudar.
- Fisioterapia. En el caso de algunos corredores, el pie plano puede contribuir a las lesiones por sobrecarga. Un fisioterapeuta puede proporcionar ejercicios para fortalecer los músculos y tendones del pie y ofrecer orientación para mejorar la marcha.
Sobre la misma línea, Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, indicó que en casos más graves, se puede necesitar una cirugía para:
- Limpiar o reparar el tendón.
- Traslado de un tendón para restaurar el arco.
- Fusionar algunas de las articulaciones del pie en una posición corregida.
¿Cómo se detecta el pie plano?
Entre las pruebas por imágenes que pueden ser de ayuda en el diagnóstico de la causa del dolor de pie, se pueden incluir las siguientes:
- Radiografías. Una radiografía simple utiliza una pequeña cantidad de radiación para generar imágenes de los huesos y las articulaciones de los pies. Es particularmente útil para evaluar la alineación y detectar artritis.
- Tomografía computarizada. Esta prueba toma radiografías del pie desde diferentes ángulos y proporciona mucho más detalle que una radiografía estándar.
- Ecografía. Es posible que se utilice una ecografía si se sospecha que existe una lesión en el tendón. La ecografía utiliza ondas de sonido para generar imágenes de los tejidos blandos dentro del cuerpo.
- Imágenes por resonancia magnética. Por medio de ondas de radio y un imán potente, las imágenes por resonancia magnética proporcionan un detalle minucioso del hueso y los tejidos blandos.
De todos modos, la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica y por ello lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona.