La National Institute of Diabetes and Kidney Diseases (NIDDK) explica que los riñones son órganos que eliminan los desechos del cuerpo y el exceso del agua a través de la orina. Sin embargo, muchas son las afecciones que se ven relacionadas que pueden empeorar su condición como, por ejemplo:

Presión arterial alta: la Clínica Mayo señala que la presión arterial alta es la “fuerza que ejerce la sangre contra las paredes de tus arterias”, que complican el funcionamiento y bienestar del corazón.

Es de mencionar que esta afección también se denomina hipertensión y los síntomas no los perciben aquellos que la presentan, por lo que puede ser aún más peligrosa por lo silenciosa que es.

La Organización Mundial para la Salud (OMS) precisa que por lo menos 1.280 millones de personas adultas entre los 30 y 79 años son los más propensos a desarrollarla. “Apenas uno de cada cinco adultos hipertensos (el 21 %) tiene controlado el problema”, puntualiza la entidad.

Diabetes: los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) aseguran que es una enfermedad crónica que altera la forma en que el cuerpo obtiene energía, ya que tras la descomposición de alimentos, la glucosa pasa al torrente sanguíneo, y es a través de la insulina que las células la obtienen, pero resulta que cuando se resisten a ella, provocan la conocida diabetes tipo II.

La OMS menciona que “la diabetes es una causa importante de ceguera, insuficiencia renal, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular y amputación de los miembros inferiores”.

El consumo de una alimentación equilibrada es una de las mejores formas de manetener los niveles de azúcar bajo control. | Foto: Fertnig/Getty Images

Sin embargo, la enfermedad de los riñones directamente los compromete, por lo que es indispensable consultar con un profesional de la salud, para identificar cuáles son las enfermedades que se relacionan con ellos.

Enfermedad de los riñones

Muchos son los síntomas que se pueden asociar con el mal funcionamiento de los riñones. El NIDDK asegura que los dolores de cabeza, la pérdida de apetito, el cansancio, los espasmos musculares, el aumento de micción, entre otros, se ven directamente relacionados.

Es entonces que esta afección es progresiva, y tal y como lo indica el instituto, los riñones no ejercen sus funciones y propician el cúmulo de desechos en el cuerpo. Entre las soluciones para este problema se encuentra el trasplante de riñón o la diálisis.

Es de mencionar que la diálisis “trata la insuficiencia renal en fase terminal. Dicho tratamiento elimina sustancias dañinas de la sangre cuando los riñones no lo pueden hacer”, precisa la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, MedlinePlus.

Foto referencia sobre riñones. | Foto: Ben-Schonewille

Los síntomas no suelen indicar el inicio de la enfermedad, sino, usualmente, su etapa final, y es en ese momento que los expertos de la salud determinan cuál es el mejor tratamiento que podría contrarrestar esta afección renal.

“Cuando la enfermedad renal crónica alcanza una etapa avanzada, niveles peligrosos de líquidos, electrolitos y los desechos pueden acumularse en el cuerpo”, menciona la Organización Panamericana de la Salud (OPS).

En conclusión, es importante mantener una dieta saludable con nutrientes que favorezcan la salud renal, y observar cuáles no ayudan con tal fin, como, por ejemplo, un consumo alto de vitamina D ocasiona estreñimiento, fatiga, irritabilidad, debilidad muscular, presión arterial alta, que desarrolla problemas como insuficiencia renal, deshidratación e hipercalcemia.

Sin embargo, los bajos niveles de este nutriente para una persona que tiene un diagnóstico desfavorable en sus riñones es perjudicial porque deteriora estos órganos.

Frutas como los arándanos contribuyen en el bienestar de los riñones porque tienen propiedades antioxidantes y son ricos en fibra, potasio y magnesio. Mejor con Salud menciona que todos estos nutrientes participan en el buen funcionamiento de los riñones fortaleciendo las células de estos órganos.