Reforzar la inmunidad no siempre es una tarea fácil. Es necesario realizar varios cambios en el estilo de vida y la dieta que ayuden a fortalecer las defensas naturales del cuerpo y a combatir patógenos dañinos u organismos que causan enfermedades, según el portal Healthline.
El sistema inmunológico es una compleja red de células, tejidos y órganos. Entre sus partes más características se encuentran la piel, las mucosas los glóbulos blancos y varios órganos del sistema linfático, como las amígdalas o la médula ósea.
Así mismo, existen diferentes tipos de inmunidad en el organismo. Según Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, estas son:
- Inmunidad activa: esta se adquiere cuando un individuo acude a las vacunas. Algunas de ellas pueden durar toda la vida y otras, como la de la influenza, requieren refuerzos.
- Inmunidad innata: es la primera línea de defensa del cuerpo y se adquiere desde que se nace. En este tipo de defensa están la piel y las mucosas.
- Inmunidad pasiva: sucede cuando se reciben anticuerpos de otro ente distinto al organismo propio. Por ejemplo, una madre le transfiere anticuerpos a un bebé. El problema de esta inmunidad es que suele terminar en algún momento y su duración no es extensa.
Si el sistema inmune falla el cuerpo está expuesto a una variedad de enfermedades que pueden atentar contra la vida de una persona. Por ello, mantenerlo en buen estado es fundamental para que diversas afecciones no limiten las actividades diarias.
El portal especializado Mejor con Salud explicó que el té negro y la cúrcuma ayudan a cumplir este objetivo. Según un estudio de la Universidad de Harvard, tomar de este té logra que se cuadrupliquen las defensas del sistema inmunológico gracias a sus antioxidantes y otras sustancias que podrían ayudar a proteger el corazón y los vasos sanguíneos.
En cuanto a la cúrcuma, el portal Nutrición y Farmacia menciona que esta especia ayuda a combatir las enfermedades infecciosas gracias a su propiedades. Además estimula el sistema inmune, ayuda aliviar dolores articulares y mejora la salud de la piel.
Para combinar estos dos productos en pro de la salud del sistema inmune se debe:
1. Preparar el té negro con antelación y, en cuanto comience a hervir, agregar la cúrcuma.
2. Esperar a que los ingredientes infusionen unos minutos.
3. Bajar del fuego y añadir un poco de leche de coco.
4. Endulzar con una cucharada de miel.
5. Revolver y consumir.
Cabe resaltar que, además de la bebida anterior, existen una serie de hábitos con los que es posible fortalecer el sistema inmune. Por ejemplo, Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, destaca el lavarse las manos con frecuencia cuando se dispone a comer.
A lo anterior, se suma el lavado de los dientes al menos dos veces al día. Así mismo, la práctica frecuente de algún deporte ayuda a recobrar fuerzas y a fortalecerlo. A esto se suma manejar el estrés y dormir al menos de 7 a 8 horas para que el cuerpo se recupere de las actividades realizadas durante el día.
Es importante señalar que se debe evitar el contacto con las personas que tienen resfriados o gripe para no contraer este virus o cualquier otro tipo de infección. De igual manera, se recomienda consultar a un médico para la supervisión del estado constante del sistema inmune.