Un trabajo publicado en The Lancet Psychiatry muestra que una de cada tres personas que tuvieron coronavirus es diagnosticada, seis meses después, con alguna condición neurológica o psiquiátrica.

Los expertos de la Universidad de Oxford se basaron en los registros de salud de 236.379 pacientes con covid-19 que tuvieron la enfermedad después del 20 de enero de 2020 y que para el 13 de diciembre del mismo año seguían con vida. En esta muestra hallaron que los sobrevivientes presentaron desde ansiedad, depresión y episodios psicóticos hasta hemorragia intracraneal y paro isquémico, entre otros.

A pesar de que fue un estudio de observación, los investigadores consideran que hay razones para pensar que el virus puede estar causando al menos algunos de esos diagnósticos. Esa conclusión se da debido a que dichas condiciones fueron más comunes entre los sobrevivientes de la covid-19 que entre quienes habían presentado otras infecciones respiratorias en el mismo periodo.

¿Qué pasa con Chile?

El país austral pasó de ser la estrella latinoamericana en el esquema de vacunación a un ejemplo de lo que no hay que hacer. Mientras que en Israel los contagios, las muertes y la ocupación hospitalaria han disminuido por la campaña de inoculación, que hasta el momento ha dejado a más del 56 por ciento de la población inmunizada, Chile ha administrado las dos dosis al 20 por ciento de los ciudadanos y, a pesar de eso, en los últimos días alcanzó cifras récords de casos, con 49.542 infecciones semanales. Las muertes también han repuntado.

Muchos piensan que estas diferencias se deben a que Israel solo ha utilizado vacunas de ARN mensajero (Pfizer y Moderna). En contraste, Chile ha puesto 10 por ciento de dosis de Pfizer y 90 por ciento de Sinovac, lo que podría representar menor eficacia frente a la variante P.1. de Brasil, presente en ese país. Otros señalan que el repunte de casos en Chile se debe a que la población se relajó a partir de la primera dosis, lo que llevó a mayores contagios y mortalidad.

El estrés y la caída del pelo

La hormona del estrés tiene la capacidad de suprimir el crecimiento del pelo en los ratones, y esto podría suceder también en los humanos, según un estudio publicado en la revista Nature.

Los folículos, encargados del crecimiento del cabello, pasan por ciclos de crecimiento y receso; y en dichos roedores, los niveles altos y crónicos de corticosterona –similar al cortisol en los humanos– hacen que los folículos se mantengan más tiempo en el estado de reposo. Esto prevendría que pasen a la siguiente etapa.

Los investigadores de Harvard saben que las hormonas de estrés de ambos seres vivos pertenecen a la misma familia e interactúan con el mismo tipo de receptores. De ahí que aconsejen a las personas, en especial a los hombres, relajarse para evitar la pérdida de pelo.

Inyección casera para el cáncer de seno

El Servicio Nacional de Salud (NHS, por sus siglas en inglés) de Gran Bretaña está utilizando un tratamiento conocido como Phesgo para el cáncer de seno. La novedad es que solo toma cinco minutos en aplicarse, lo que reduce drásticamente las tres horas que las personas con esta enfermedad pasan en el hospital para recibir su quimioterapia.

Por eso, uno de los mayores beneficios es que permitirá que los pacientes permanezcan en casa con sus familias, en vez de estar en una sala de hospital conectados a dispositivos dispensadores de medicamentos. Además, ayuda en la reducción del riesgo de contagio de covid-19, pues previene la exposición a este patógeno.