Es importante prestar atención a los niveles de glucosa en la sangre. Tener niveles muy bajos o muy elevados pone en riesgo la salud de las personas, especialmente de aquellas que tienen un diagnóstico de diabetes.

Según explican los expertos de Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, si una persona tiene una subida de azúcar, conocida como hiperglucemia, puede presentar los siguientes síntomas:

  • Aumento de sed
  • Micción frecuente
  • Fatiga
  • Náuseas y vómitos
  • Dificultad para respirar
  • Dolor de estómago
  • Mal aliento
  • Sequedad en la boca

En caso de presentar estos síntomas y sentir que se va a perder el conocimiento o sufrir un desmayo, se debe acudir inmediatamente a un centro médico para recibir atención urgente, ya que está en riesgo la vida del individuo que lo padece.

Las personas que tienen diabetes deben verificar estos niveles regularmente, porque se puede presentar una subida de azúcar asintomática.

Cuando los niveles de glucosa son extremadamente elevados y una persona tiene diabetes, puede padecer una complicación grave conocida como coma diabético.

“Si caes en un coma diabético, te encuentras con vida, pero no te puedes despertar ni responder intencionadamente a los estímulos visuales, sonoros o de otro tipo. Si no se trata, un coma diabético puede ser mortal”, detalla Mayo Clinic.

Los expertos indican que cualquier persona con diabetes corre el riesgo de padecer un coma diabético. Sin embargo, existen algunos factores que pueden elevar dicho riesgo, como dificultades con la provisión de insulina, saltarse las comidas, no utilizar insulina y una enfermedad o lesión.

Factores que pueden incrementar los niveles de azúcar en la sangre

Es importante tener un estilo de vida saludable que contribuya a mantener los niveles de glucosa normal en el torrente sanguíneo. Asimismo, seguir las recomendaciones médicas al pie de la letra. Además del consumo de alimentos, también existen algunos factores que pueden contribuir a elevar esta sustancia. Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) los explica:

  • Tener dificultad para dormir: no poder descansar por falta de sueño puede hacer que disminuya la eficacia del organismo respecto al uso de la insulina. De acuerdo con los expertos, una noche de falta de sueño puede afectar los niveles de glucosa.
  • No desayunar: además de ser perjudicial para la salud del cuerpo en general, saltarse el desayuno puede aumentar estos valores en la sangre, después el almuerzo y la cena.
  • Tomar café: aunque esta bebida ayuda a tener energía para el día, tomar café, incluso sin endulzante aumenta el azúcar en algunas personas que son sensibles a la cafeína.
  • Estar deshidratado: es vital tomar al menos ocho vasos de agua al día para mantener el cuerpo hidratado. Cuando hay poca agua en el organismo, hay una mayor concentración de azúcar en la sangre.
  • Tener quemaduras solares: los daños causados por el sol causan estrés en las personas. Este estrés es uno de los factores por los que se aumenta la glucosa.
  • Consumir endulzantes artificiales: se debe tener cuidado con el consumo de estos productos porque, aunque existen pocas investigaciones respecto a esto, algunos resultados indican que pueden aumentar el azúcar en la sangre.

Asimismo, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades mencionan las temperaturas elevadas, es decir ,el calor extremo también puede afectar los niveles de azúcar, pero disminuyendo los valores. Esto se debe a que “el calor extremo puede hacer que sus vasos sanguíneos se dilaten, lo cual hace que la insulina se absorba más rápidamente y podría causar una caída del azúcar en la sangre”.