Las propiedades del aceite de almendras prácticamente no necesitan presentación, pues son amplias y brindan grandes beneficios no solo a la piel sino a la salud en general. Se trata de un producto que ofrece una importante cantidad de antioxidantes, además de ácidos grasos como el omega 3 y 6.
Así mismo, se considera hidratante y nutritivo por sus ácidos grasos, los cuales no permiten que la piel se reseque y se vea opaca; exfoliante, ya que limpia y elimina las impurezas del rostro; y mejora las afecciones de la piel, porque por los nutrientes que tiene “alivian los picores, la inflamación y el enrojecimiento”, explicó el portal Mundodeportivo.
En cuanto al café, se dice que tiene más consecuencias negativas que el té, entre ellas: incremento del ritmo cardíaco, manchas en los dientes y gastritis. Pero lo cierto es que el café tiene también varias propiedades saludables que contribuyen a la salud del cuerpo humano.
Esta bebida integra propiedades antioxidantes que ayudan tanto a la piel como al cabello. De hecho, es un producto sumamente utilizado para desvanecer las ojeras que se forman por el cansancio y la falta de sueño. También estimula la circulación sanguínea, por lo que mejora la apariencia de la piel considerablemente.
La combinación de estos dos productos (aceite de almendras y café), puede contribuir a aminorar arrugas. Según el portal especializado en belleza y estilo de vida Soy Carmín, un suero elaborado con estos dos ingredientes ayuda a “remover las células muertas acumuladas en el cutis, acelerar el proceso de regeneración de a epidermis y a estimular la producción de colágeno”.
Elaboración: se requieren tres cucharadas de aceite de almendras, dos cucharadas de café de grano molido y un frasco con gotero.
Preparación y uso:
1. En el frasco, verter el aceite y el café.
2. Mezclar hasta que todos los ingredientes se integren correctamente.
3. Colocar en la nevera durante 24 horas.
4. Limpiar el rostro para que los ingredientes penetren correctamente.
5. Aplicar el suero sobre el cutis con el gotero.
6. Dejar actuar durante toda la noche.
7. Enjuagar con abundante agua fría.
8. Aplicar tres veces por semana.
Cabe resaltar que las arrugas son una parte natural del proceso de envejecimiento. A medida que la gente envejece, su piel se vuelve más fina, más seca y menos elástica. Además, es menos capaz de protegerse de los daños. Por esta razón, se producen más rápido las arrugas y las líneas en la piel. Entre sus factores de aceleramiento están:
- Las expresiones faciales: sonreír repetidamente, fruncir el ceño o entrecerrar los ojos puede conducir a la aparición de líneas finas y arrugas a una edad más temprana. Cuando una persona es joven, la piel vuelve a nacer, pero a medida que envejece la piel pierde su flexibilidad.
- La exposición a la luz ultravioleta (UV): a través de baños de sol, cabinas de bronceado y algunos deportes al aire libre, aumenta la posibilidad de desarrollar arrugas a edad temprana. Esto se produce por la luz ultravioleta, la cual descompone las fibras de colágeno y elastina de la piel.
- El alcohol: beber mucho alcohol deshidrata la piel y, al estar seca, tiene más probabilidades de arrugarse.
- Fumar con regularidad: fumar acelera el proceso de envejecimiento de la piel, debido a la reducción del suministro de sangre a la piel. Los radicales libres del tabaco reducen la capacidad antioxidante, disminuyen la absorción de vitamina A y alteran los niveles de colágeno y elastina, añadiendo más años a la piel.