Las migrañas, dolores de cabeza intensos, o también conocidos como jaqueca, son una patología que es más común de lo que habitualmente se cree, y si bien muchas veces puede estar motivada por agentes externos, también podría tener mucho que ver con el estado de salud de las personas e incluso con factores hereditarios.
Esta situación, que se traduce muchas veces en un factor que afecta la calidad de vida de las personas, obliga en algunos casos a la suspensión de la actividad que se está realizando, debido a la sensación de latigazo, o pálpito en el cerebro, a la vez que, según estudios de la Clínica de Mayo, pueden estar acompañadas de náuseas, y menor tolerancia a la luz y el ruido, lo que sugiere la necesidad de descanso.
Si bien puede presentarse desde etapas previas, el grueso de la población que padece esta patología, se ubica entre los 35 y 45 años, siendo una condición que se hace más frecuente en las mujeres debido a situaciones del orden hormonal, y que si bien no es prevenible, si puede contar con algunas estrategias para ser atenuada, al derivarse de una dilatación de los vasos sanguíneos que hacen presencia en la región del encéfalo, debido a la liberación de sustancias que inflaman el cerebro y que genera dolor al afectar los nervios que allí hacen presencia.
Los expertos apuntan que, al ser una situación tan particular, no podrían existir ‘fórmulas mágicas’ para prevenirla, pero sí podría adaptarse para evitar algunos de los estímulos que la generan, más aún cuando en un 80% de los casos, estos también tienen raíz en cuestiones hereditarias.
Si bien uno de los principales factores que pueden contribuir a mitigar el riesgo de sufrir migraña es el debido descanso, así como la realización de actividad física y bajar los niveles de ansiedad y estrés, los expertos también mencionan en la estrategia la debida alimentación, mencionando a su vez una serie de alimentos que deberían evitarse al ser causantes de estímulos que darían pie a los dolores de cabeza.
En materia de alimentación, un factor clave para evitar la migraña se refiere a la correcta hidratación y a la constante ingesta de agua, lo que contribuye a un correcto funcionamiento del cerebro.
En la misma senda, los especialistas anotan la importancia de evitar, o decir ‘no’ a los llamados productos ultraprocesados, en tanto algunos de sus componentes no facilitan el debido funcionamiento cerebral, y, por el contrario, causan problemas en él, debido a la presencia de aditivos y químicos poco saludables.
De igual modo, en el listado de alimentos que se deben evitar para prevenir la jaqueca, se encuentran aquellos que cuentan con altos contenidos de azúcares y cafeína, no obstante, también su ausencia radical derivaría en dolores de cabeza, debido a la ansiedad que genera su deseo de ingesta.
El queso es otro de los alimentos que hacen parte de este listado, debido a la alta presencia de sodio y grasas que pueden resultar incentivos adversos para tratar la inflamación que deriva en cefalea.
Expertos incluyen también otros lácteos del corte de helados, en los casos en que sus altos niveles de azúcar no contribuyen al control de la situación.
En ese mismo sentido, el listado menciona al chocolate, debido a sus niveles de grasa y azúcar que derivan en el mal funcionamiento cerebral, a la vez que generan ansiedad por consumirlos.
En cuanto al café, un alimento considerado estimulante, este puede resultar contraproducente en tanto sus capacidades para inhibir sueño, por lo que su ingesta irregular afecta el descanso y ello podría derivar en jaquecas. Algo similar puede ocurrir con las gaseosas, debido a los picos de glucemia y a la sobre estimulación que deriva en cefaleas.
Según los expertos, en los casos de las personas que padecen de recurrentes migrañas, también es digno de considerar la reducción del consumo o ingesta de carnes rojas, debido a las características de estas y su capacidad de generar inflamación.
En este caso, si bien la inflamación se genera a nivel intestinal, el cerebro también se puede ver afectado debido a la relación de los dos órganos a través del nervio vago.
En el caso del alcohol, este tiene efectos relajantes que generan en cierto modo dependencia, por lo que la ausencia de este en esos escenarios deriva en dolores de cabeza, algo similar a lo que ocurre con las llamadas harinas refinadas.
Si bien la lista es extensa, es necesario recordar que es importante no generalizar, pues no todos los alimentos tienen la misma reacción en todas las personas. En ese sentido, es relevante determinar los efectos de cada uno de ellos, de manera individual, aclarando que el efecto de migraña derivado de un alimento se presenta entre 12 y 24 horas después de su ingesta.
En contraposición, los expertos también presentan una lista de alimentos que pueden tener un efecto contrario, y pueden ayudar a reducir el riesgo de dichas jaquecas.
Así, la lista menciona algunas legumbres como los garbanzos y las lentejas, así como las frutas no cítricas, el arroz integral, la quinua, y la cebada.