Generalmente los talones agrietados, también conocidos como fisuras, son un signo claro de un mal cuidado de los pies. Sin embargo, también son síntoma de deshidratación y, en algunos casos, cuestiones de salud.
Esto suele ocurrir cuando la piel que rodea los talones se reseca, no se hidrata adecuadamente y recibe la presión del cuerpo sobre ella. En casos menores, este problema también puede indicar deficiencia de zinc y de ácidos grasos omega-3, según el portal Mejor con Salud.
La especializada en podología, Podactiva, señala que la piel del pie es diferente a la del resto del cuerpo. Se caracteriza por tener un mayor número de células adiposas. Es decir, un mayor espesor para amortiguar el continuo roce al caminar llegando a ser 50 veces más gruesa que la de la zona de la mejilla de la cara. Además, tiene pocas sustancias grasas y, por eso, no cumple correctamente su función “hidratante”
Por esta razón se deben cuidar y prestarles un poco más de atención, comenzando con humectarlos al menos dos veces al día.
Independientemente de cuál sea la causa de los talones agrietados y la resequedad de los pies, estos suelen contemplarse como un problema estético, bastante desagradable y en algunos casos puede causar dolor.
En el mercado existen varias cremas para poder hidratarlos, pero las mejores suelen ser muy costosas. Sin embargo, existen ciertos remedios caseros que pueden tanto aliviar el dolor como hidratar la piel de los mismos:
Aceites vegetales
El uso de aceites vegetales (como el de coco, aceite de almendras o argán) puede ayudar a hidratar la piel en gran medida. Esto ayudaría a combatir la resequedad y las grietas.
Modo de uso:
- Utilizar una buena cantidad de aceite de coco o aceite de oliva para hidratar profundamente la piel reseca de los talones.
- Una vez se aplique, colocar un calcetín de algodón toda la noche para que el aceite actúe toda la noche.
- Lavar por la mañana y repetir el tratamiento todos los días.
Plátano y aguacate
Esta mascarilla ayuda a hidratar la piel, suaviza y mejora notablemente la apariencia de los talones secos.
- Solo se debe preparar una pasta con un plátano y un aguacate maduros.
- Aplicar esta mezcla sobre la piel de los talones agrietados, dejar actuar media hora y enjuagar.
Aceite de coco y parafina
Funciona como una buena terapia cuando los talones causan dolor y diferentes molestias.
Modo de uso:
- Mezclar un poco de cera de parafina con aceite de coco, calentar al baño María, mezclar bien todo y dejar enfriar.
- Cuando esté tibio, ponerlo sobre los talones, cubrirlo con unos calcetines y dejarlo actuar toda la noche.
Exfoliante de avena
Este exfoliante natural de avena ayuda a suavizar la piel de los talones, ablanda la dureza y contribuye a una mejor apariencia del pie.
Modo de uso:
- Mezclar avena en polvo y un poco de aceite de jojoba hasta conseguir una pasta.
- Aplicar con suaves masajes circulares en la zona afectada, dejar actuar 10 minutos y retirar con agua tibia.
Tratamiento de vaselina
Un estudio publicado en Canadian Family Physician, afirma que la vaselina puede ayudar a hidratar la piel, ablandar las durezas, reduciendo a la vez y notablemente el problema de talones agrietados.
Modo de uso:
- Sumergir los talones en agua caliente con sal durante 15 o 20 minutos.
- Secar bien los pies y luego untar los talones con una cucharada de vaselina.
- Cubrir los pies con calcetines de algodón y dejar actuar toda la noche.
- A la mañana siguiente, retirar los calcetines.