Al aguacate se le reconoce como una de las frutas que más brinda beneficios al organismo. Ayuda a hidratar y a mantener la salud de la piel gracias a su aporte de vitamina E y algunas del complejo B. Además, posee propiedades antioxidantes y grasas buenas que aportan para regular el colesterol y la presión arterial.
Es una fruta que puede ser utilizada en las dietas para bajar de peso y por personas que sufren de diabetes, debido a que es rica en fibras que ayudan a aumentar la sensación de saciedad y a regular la absorción de los azúcares a nivel intestinal. Sin embargo, no debe consumirse en exceso debido a su alta carga calórica, según información del portal de bienestar y salud Tua Saúde.
El portal Cuerpo Mente asegura que el aguacate aporta el 22 % de las necesidades diarias de vitamina C, un poco de provitamina A y una variedad de minerales como potasio, calcio, magnesio, fósforo, hierro, cobre y zinc, todos clave para el buen funcionamiento del organismo.
Debido a su riqueza en ácidos grasos, magnesio y vitaminas del grupo B, esta fruta es reconocida por ser un alimento que ayuda a regular el sistema nervioso, por lo que está especialmente indicado en situaciones de estrés tanto físico como mental.
No obstante, no solo su pulpa brinda beneficios a la salud. También el consumo de sus hojas en té o infusión es favorable. De acuerdo con un estudio publicado por la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el agua de hojas de aguacate es una buena fuente de nutrientes y fitoquímicos.
Los análisis efectuados en laboratorio determinaron su efecto en la reducción en el peso corporal. Los investigadores creen que esto se debe a que aumentó el catabolismo de las grasas acumuladas en el tejido adiposo, lo que se traduce en una disminución del peso corporal medio, precisa una publicación del diario El Universal, de México.
También funciona como analgésico y antiinflamatorio. Una de las conclusiones de la investigación es que la bebida tuvo un efecto inhibidor de la inflamación similar al del ácido acetilsalicílico e igual al de la morfina.
Por otro lado, estas hojas reducen las molestias estomacales debido a que estimulan la producción de jugos gástricos, los cuales mejoran la digestión y disminuyen la acidez estomacal.
Un artículo del portal Gastrolab, de México, destaca otras bondades que han sido motivo de análisis y que están relacionadas con la inhibición del virus como el herpes simple tipo 1 y del adenovirus tipo 3. Además, a estas hojas se le han descubierto propiedades antioxidantes, que son favorables para proteger las células del organismo del desarrollo de diversas enfermedades. “Es un agente potencial contra enfermedades hepáticas y otras patologías asociadas con el estrés oxidativo”, precisa el artículo de El Universal.
¿Cómo se prepara?
Para elaborar una infusión con estas hojas solo se requiere de lavarlas y ponerlas en agua a fuego medio, esperar a que hierva, retirarla y deja infusionar por tres minutos. Si la persona lo prefiere puede agregar unas gotas de jugo de limón y miel. Lo recomendable es tomarla sola.
Pero aunque se trata de un remedio natural, lo mejor siempre es consultar al médico, pues estas hojas tienen algunas contraindicaciones a las que se debe prestar atención. Dado que reduce los niveles de azúcar en la sangre, las personas diabéticas o que siguen un tratamiento deben tomar medidas de precaución para evitar mayores complicaciones con la glucosa.
Las mujeres embarazadas y en periodo de lactancia, deben evitar su consumo, así como aquellas personas que tienen problemas de coagulación o están tomando anticoagulantes. Tampoco es recomendable su consumo por largos periodos.