Existen muchas plantas llamadas “medicinales” por los beneficios que pueden aportar en el tratamiento de las afecciones. Algunas de las más conocidas son el romero, el orégano, el tomillo, la manzanilla y la hierbabuena. Todas estas plantas son utilizadas como remedios caseros para aliviar los síntomas y mejorar el estado de salud.

La manzanilla tiene propiedades que contribuyen a aliviar la irritación de mucosas y ojos, además de ser antiinflamatoria. De acuerdo con un estudio publicado en el National Center for Biotechnology Information (NCBI), las flores de esta planta contienen terpenoides y flavonoides, por lo que es normal que las personas la utilicen como relajante muscular, desinflamatorio e incluso para aliviar problemas del sistema digestivo al ser antibacteriana. Aunque puede utilizarse de diversas formas, una de las más comunes y prácticas es la infusión.

Té de manzanilla | Foto: Semana

El romero, por su parte, ha sido tradicionalmente usada como condimento y tiene importantes propiedades medicinales para la salud. Por ese motivo, además de darle un toque especial a las comidas, hoy por hoy esta planta también está incluida entre los ingredientes de los cosméticos y se utiliza con fines médicos, pues tiene propiedades estimulantes, antisépticas, diuréticas, cicatrizantes y antimicrobianas, de acuerdo con el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde.

Además, la Fundación Española de la Nutrición (FEN) reveló que es fuente de fibra, calcio, hierro, magnesio, zinc, potasio, taninos, ácido rosmarínico, rosmaricina, folatos, tiamina, riboflavina, vitaminas A, C y B6.

Una rama de romero. | Foto: Semana

Otros beneficios de la manzanilla y el romero para la salud

Entre las propiedades que destacan del romero y que pocos conocen son sus beneficios para el cerebro, en especial para la memoria. De acuerdo con una reseña publicada por Alexander Leonhardt en el portal Herbs Info, la Universidad de Northumbria en Reino Unido publicó un estudio en el que asegura que al oler la planta de romero aumentaría la capacidad de almacenamiento de la información hasta un 70 % para las personas.

Adicional a ello, esta planta medicinal mejora la circulación sanguínea y ayuda a superar la fatiga mental, pues fortalece el sistema nervioso. En ese sentido, cuando esta planta es consumida como infusión, ayuda a aliviar el estrés y aumenta la memoria, evitando enfermedades como el Alzheimer.

Estudios revelan que algunas células pueden permanecer vivas por horas en el cerebro, luego de la muerte de una persona. Getty Images. | Foto: sudok1

Del mismo modo, el romero, al ser una planta rica en hierro, es una excelente opción para algunos casos de anemia, supliendo la falta de hierro, así como también mejora los trastornos asociados al sistema circulatorio, como es el caso de la trombosis, várices, entre otros y ayude a reducir los flujos menstruales abundantes, explica el diario ecuatoriano El Universo.

Sumado a las propiedades ya mencionadas, el romero también es utilizado con fines de belleza. Es una planta rica en antioxidantes a la que se le atribuyen efectos rejuvenecedores y además ayuda a cuidar el cuero cabelludo y a tapar las canas.

Estudios afirman que la falta de vitamina B12 está relacionado con la aparición de canas en el cabello | Foto: libre de derechos

Con respecto a la manzanilla o también llamada camomila, generalmente es utilizada como paliativo del insomnio o las causas del descontrol del sueño como la ansiedad y el pánico, entre otros. Por ese motivo, consumir en la noche la infusión de manzanilla permite que las personas descansen y recuperen energía.

Asimismo, tiene propiedades que ayudan a calmar la ansiedad, lo que contribuye a que el cuerpo se sienta saciado y por ende disminuya el deseo de estar consumiendo alimentos. Si la persona quiere potenciar este efecto, puede agregar a la infusión hojas de té verde, que es ideal para cumplir con el propósito de bajar de peso. Según el portal Mejor con Salud, el té de manzanilla posee propiedades diuréticas, por lo que es un buen remedio contra la retención de líquidos.