A pesar de que la ciencia avanza cada vez más en todo lo relacionado con la medicina, las plantas o hierbas medicinales figuran para muchas personas en Colombia y en diferentes partes del mundo como la principal alternativa al momento de prevenir y combatir una gran cantidad de afecciones.
Por lo general, estos elementos de origen natural se consumen en tés o infusiones. Su preparación es muy sencilla, para esto solo se necesita agua, una olla y la planta o hierba elegida. Su consumo debe ser sin azúcar ni edulcorantes artificiales para no echar a perder sus propiedades.
“El té es una bebida que ha tenido un importante papel en la vida social y cultural de las personas en todo el mundo por miles de años. Desde nuestros antepasados, las plantas se han utilizado en forma de infusiones para tratar diferentes padecimientos o como método de relajación. En México, desde la civilización azteca, los médicos prescribían descanso con bebidas aromáticas y otras bebidas elaboradas con hierbas frescas o secas, incluyendo hojas, semillas flores, tallos, raíces o frutos, las cuales proporcionaban sabor, olor, salud y bienestar”, explica el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo.
También incluye que “diversos estudios han asociado el consumo habitual de té e infusiones herbales con propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antidepresivas, antidiabéticas, antimutagénicas y anticancerígenas, las cuales son atribuidas, principalmente, por su contenido en compuestos fitoquímicos como los polifenoles, terpenos, cumarinas y alcaloides, entre otros”.
Como todo alimento, los tés e infusiones naturales se deben consumir en cantidades adecuadas, un exceso podría afectar de diferentes maneras el organismo. Asimismo, su ingesta debe ser autorizada por un profesional de la salud de acuerdo con las condiciones de cada individuo, dado que, hay personas que podrían ser alérgicas a las plantas o hierbas y lo desconocen.
Si no se respeta el consumo de hierbas medicinales una persona puede enfrentar graves consecuencias, las más comunes son los dolores de cabeza o ataques de migraña, confusión, falta de agilidad mental, nerviosismo e irritabilidad.
Son muchas las hierbas o plantas medicinales implementadas para preparar infusiones naturales. Las más utilizadas son el anís, la menta, el jengibre, el hinojo, la canela, la Jamaica, la manzanilla y el muy conocido romero.
Precisamente, este último es el que acumula más propiedades. De acuerdo con la plataforma digital La Vanguardia, estos son los cinco beneficios que aporta su consumo a la salud:
1. Mejora la digestión. “Tomarlo después del almuerzo o en la cena puede mejorar el proceso digestivo, también ayuda a combatir la acidez y el exceso de gases. De esta forma, disminuye el estreñimiento, la sensación de estar lleno todo el tiempo y la falta de apetito”, afirma.
2. Antibiótico natural. Las propiedades medicinales que acumula una planta como el romero permiten que este sea un antibiótico natural, por lo que es un elemento muy eficaz contra infecciones urinarias, vómitos y diarrea.
3. Es diurético. La infusión o té de romero es un perfecto diurético, por lo que es fundamental para bajar de peso de forma rápida. Ayuda a eliminar los líquidos retenidos porque incrementa la producción de orina.
4. Combate el cansancio mental. “Según diversos estudios, el romero brinda beneficios en el funcionamiento cerebral, ya que, es de gran ayuda en periodos de estrés. Además, sus propiedades pueden ayudar a combatir la aparición del Alzheimer o evitar la pérdida de memoria”, señala esa plataforma digital.
5. Limpia el hígado. El sitio en cuestión concluye indicando que el romero es un aliado para cuidar la salud del hígado, esto porque ayuda a eliminar el exceso de grasa que se acumula en este órgano.