Las hierbas o plantas medicinales son elementos de origen vegetal que los seres humanos han implementado desde años ancestrales por sus propiedades curativas. En la actualidad siguen figurando como la principal alternativa para muchas personas en Colombia y en diferentes partes del mundo al momento de combatir cualquier afección o dolencia.
Por lo general, las plantas medicinales se consumen en infusión o en té; para su preparación solo es necesario contar con una cantidad determinada de agua y la hierba predilecta. Asimismo, también se pueden implementar por vía tópica, es decir, es posible aplicarlas sobre la piel.
Existen una gran cantidad de hierbas con propiedades medicinales; las más comunes son el jengibre, el diente de león, la salvia, la cola de caballo, la cúrcuma, la manzanilla, el aloe vera, el ajo, el eucalipto, el tomillo, la tila, el orégano, el agave, la menta, la ortiga, la amapola, el ajenjo, el romero, entre otras más.
Una de las más consumidas a nivel mundial es el romero. “El romero es una especie vegetal común en la península Ibérica y, en general, en toda la cuenca mediterránea. Se utiliza desde la Antigüedad en la medicina tradicional, gracias a las múltiples propiedades que se le han atribuido históricamente. El interés que despierta esta planta aromática en la actualidad radica en el potente efecto antioxidante de algunos de sus componentes”, explica el sitio web El Sevier.
“Los principios activos se concentran en las hojas y, a veces, en la sumidad florida. Las primeras son opuestas, coriáceas y estrechamente lineares. Pueden llegar a medir hasta 3 cm de largo y 4 mm de ancho, y sus márgenes enteros enrollados hacia abajo hacen que parezcan casi cilíndricas. La cara superior de las hojas jóvenes es pelosa y de color verde intenso, las hojas adultas son glabras. Esta cara es rugosa y está surcada por el nervio medio, que está hendido. Este mismo nervio sobresale claramente en el envés, que está cubierto por un denso tomento blanco”, agrega el portal.
Los beneficios que aporta una planta medicinal como el romero son múltiples. Por ejemplo, algunos de los más conocidos son su capacidad de mejora a un proceso tan importante como la digestión y a un órgano, el más grande del cuerpo humano, la piel.
Cabe mencionar que la digestión es el proceso de transformación de los alimentos y líquidos consumidos para su posterior descomposición, esto con el fin de utilizarlos como fuente de energía o para la reparación de los tejidos dañados. Por su parte, la piel es un órgano que se encarga de proteger el interior del cuerpo de agentes externos como bacterias y sustancias químicas dañinas.
“El té de romero puede tomarse luego del almuerzo o de la cena, siendo útil para mejorar el proceso digestivo, ayudando a combatir la acidez y el exceso de gases. De esta forma disminuye la distensión abdominal, la sensación de llenura y la falta de apetito”, reseña el portal especializado Tua Saúde.
Por su parte, el portal Balmoria, indica que el romero “ayuda a eliminar la inflamación de la piel, esto se debe a que es un excelente antioxidante y ayuda a retrasar el envejecimiento en la piel. Además, también es perfecto para combatir imperfecciones como barros y espinillas”. Así se prepara.
Ingredientes:
- 250 ml de agua hirviendo.
Procedimiento: se debe agregar el romero en el agua hirviendo, dejar reposar durante 3 a 5 minutos. Luego, es necesario colarlo. Por último, se puede beber tibio y sin endulzar.