El hígado es el órgano de mayor tamaño dentro del cuerpo y ayuda al organismo a digerir los alimentos, almacena energía y elimina toxinas, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
Además, los problemas hepáticos pueden ser causados por una variedad de factores que dañan el hígado, como los virus, el consumo de alcohol y la obesidad.
Asimismo, existen muchos tipos de enfermedades hepáticas: causadas por virus como la hepatitis A, la hepatitis B y la hepatitis C; originadas por drogas, venenos o toxinas, o por ingerir demasiado alcohol. Los ejemplos incluyen enfermedad por hígado graso y cirrosis, cáncer de hígado, enfermedades hereditarias como hemocromatosis, y la enfermedad de Wilson, según Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos.
Por su parte, la diabetes es una enfermedad metabólica crónica caracterizada por niveles elevados de glucosa en sangre, según la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Si una persona tiene diabetes, el cuerpo no produce una cantidad suficiente de insulina, o no puede usar adecuadamente la que produce, y cuando no hay suficiente insulina o las células dejan de responder a ella, queda demasiada azúcar en el torrente sanguíneo que, con el tiempo, puede causar problemas de salud graves, como enfermedad del corazón, pérdida de la visión y enfermedad de los riñones.
Por ello, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar Tua Saúde reveló que el té de romero es ideal para purificar el hígado y combatir la diabetes, ya que esta planta “podría mejorar el funcionamiento del hígado y disminuir el dolor de cabeza que surge después de haber comido en exceso, principalmente comidas con elevado contenido de grasas o de bebidas alcohólicas”.
Además, explicó que “también ayuda a mantener la diabetes bajo control, debido a que disminuye la glucosa y aumenta la insulina, pero la ingesta de este té no excluye el uso de medicamentos recomendados por el médico y de la realización de una dieta adecuada, debiendo ser ingerido como complemento del tratamiento médico y nutricional”.
No obstante, al igual que con cualquier alimento o suplemento que se quiera incluir en la dieta diaria, es importante consultar al médico tratante o a un nutricionista sobre cuál es la mejor manera de consumir, y si las condiciones médicas ya existentes no son un impedimento para beneficiarse de todas las propiedades de la planta ya nombrada, pues la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.
Adicional, porque, según la biblioteca de Estados Unidos, las hierbas medicinales (o remedios herbales) son plantas usadas como medicamento y las personas las usan para ayudar a prevenir, curar una enfermedad, para aliviar síntomas, incrementar la energía, relajarse o perder peso. Sin embargo, las hierbas no son reguladas ni probadas como los medicamentos.
Además, “natural” no quiere decir seguro a menos que se tomen de la manera indicada, pues algunas hierbas pueden interactuar con otros medicamentos o ser tóxicas en dosis altas. También pueden causar efectos secundarios.
Por ejemplo, el portal de salud de Mapfre reveló que “se considera que el principio activo del romero carece de toxicidad; sin embargo, las personas especialmente sensibles pueden experimentar reacciones alérgicas, como dermatitis por contacto y eritema”.
¿Cómo preparar el té de romero?
Ingredientes:
- 5 g de hojas frescas de romero
- 250 ml de agua hirviendo
Preparación:
- En una olla, añadir la cantidad señalada de agua y dejar que hierva.
- Luego, en un vaso agregar las hojas frescas de romero y después echar el agua hirviendo. Para que infusione correctamente, se debe dejar reposar entre tres a cinco minutos, cubierto con un plato o una tapa.
- Para servir, se aconseja colar esta bebida y esperar a que enfríe un poco antes de tomarla. Asimismo, se recomienda no endulzar este té.
- Tenga en cuenta que este té puede tomarse entre tres y cuatro veces al día.