Es muy importante que para hablar de la glucosa lo primordial es entender que se trata de una sustancia vital y necesaria para la sangre, así como lo son las grasas.
Es válido aclarar que tanto grasas y azúcares en la sangre no son buenas cuando hay exceso de ellas, ya que esto llevaría a un desequilibrio de la salud y el mismo organismo no podría atenderse por sí solo.
Por su parte, Medline Plus destaca que la glucosa no es mala y que esta es simplemente el azúcar que hay en el cuerpo; siendo la principal fuente de energía porque está en cada célula del cuerpo y proviene de los alimentos que se incluyan en la dieta diaria.
Por su parte, el portal de salud KidsHealth indica que si hay una alta concentración de azúcar en la sangre por largos periodos de tiempo, esto puede causar inconsistencias en la salud, graves la mayoría de veces si no se trata, ya que esto puede dañar los vasos sanguíneos que llevan sangre a órganos vitales. Dicho esto, esta situación puede incrementar el riesgo de enfermedades de corazón, accidentes cerebrovasculares, enfermedades renales, problemas en la vista y problemas neurológicos.
Ante esto, el portal Health Line explicó que esta sustancia “es el más simple de los carbohidratos, lo que lo hace un monosacárido, incluyen la fructosa, la galactosa y la ribosa. Está presente en el pan, frutas, vegetales y productos lácteos (...) el cuerpo le avisa al páncreas que necesita liberar insulina (hormona) para tratar el incremento del nivel de azúcar en la sangre”.
No obstante, este portal destacó que en el momento en que ese órgano falla y tiene problemas en su funcionamiento, los niveles de insulina que produce no son suficientes para controlar la glucosa, por lo que las personas estarían cerca de padecer algunas enfermedades.
Frente a esta insuficiencia de producción de insulina y frente a la concentración de azúcar en la sangre, es importante controlar estos niveles, por lo que para ello es necesario realizar controles o exámenes de laboratorio de manera periódica, según lo establezca el médico especializado. La idea de este rigor, es conocer el comportamiento del páncreas, la producción de insulina y la manera en que se regula la glucosa en la sangre.
Ahora bien, este resultado del control de nivel de glucosa es importante porque al estar alto allí el médico determinará, muy seguramente, un cambio en los hábitos alimenticios y también en la rutina cotidiana.
En ese sentido, los expertos en nutrición y salud aclaran que hay ciertos alimentos que ayudan a controlar los niveles de glucosa y azúcar en la sangre de manera natural, aunque siempre es importante contar con la aprobación de un especialista.
Dicho esto, el té verde, el cual proviene de la planta de té, conocida con el nombre científico de camellia sinensis, es una infusión que contiene muchas propiedades antioxidantes y llenas de fibra, lo cual ayuda a controlar los niveles altos de azúcar en la sangre.
“El té verde (Camellia sinensis) es una bebida originaria de China que se consume en todo el mundo en la actualidad. Para producirlo, se recolectan hojas frescas que, después de someterse al secado, se prensan, enrollan y trituran. El hecho de que sufra oxidación durante su procesado hace de él una bebida especial”, indica el portal Mejor con Salud.
Ingredientes
- 1 cucharada de té verde (15 g).
- 1 taza de agua (250 ml).
Preparación
- Poner a calentar el agua y, cuando hierva, añadirle el té verde.
- Reducir el fuego al mínimo y dejarlo que infusione durante 5 minutos.
Cabe recordar que la información suministrada en el contenido anterior no sustituye la asesoría médica y, por su lado, lo mejor que puede hacer es consultar a un experto de la salud.