Ejercitar el cerebro y llevar hábitos de vida saludables son dos aspectos clave para reducir el riesgo de sufrir deterioro cognitivo, mantener la memoria y minimizar la posibilidad de demencia.

Al igual que se entrena y se ejercita el cuerpo, también es importante hacerlo con el cerebro, pues se trata de un músculo que necesita cuidado para mantenerse saludable.

Si no se estimula, el cerebro puede atrofiarse, acomodarse y perder capacidades. Por tanto, si se quiere mantener joven, mejorar la memoria, la creatividad, la concentración y alcanzar un envejecimiento saludable, se tienen que poner en marcha una serie de acciones tendientes a estimularlo.

De acuerdo con la experta Lydia Cho, quien explicó en un artículo para Harvard las mejores formas de mantener la memoria, no se debe esperar recopilar toda la información recibida en un día. Sin embargo, para tratar problemas de falla de memoria que pueden ser cotidianos se pueden adaptar ciertas estrategias.

Tips para conservar la memoria

Realizar ejercicio:

Cualquier ejercicio cardiovascular es bueno para la salud cerebral, esto puede ser caminar, nadar o practicar algún deporte. La experta señaló que “el cardio puede aumentar la energía en el cerebro al mejorar el oxígeno y el flujo sanguíneo”.

Estimulación cognitiva:

Desafiar el cerebro regularmente es fundamental para preservar su memoria, la experta señala que una de las formas de hacerlo es resolviendo crucigramas, aprendiendo idiomas, música, entre otras cosas.

Meditación o relajación:

Practicar yoga o alguna técnica de relajación resulta necesario para que el cerebro tenga un tiempo de inactividad adecuado. Meditar por 12 minutos al día además resulta útil para prevenir el alzheimer, destaca Cho.

Otros consejos:

Los expertos señalan que, en general, todo lo que implique un cambio, un desafío, un aprendizaje para el cerebro es fundamental para su desarrollo. Lo ideal es evitar que se acostumbre a estímulos monótonos y limitados, por ello es clave enfrentarse a novedades y retos, cambiar el tipo de actividad que se realiza normalmente y aumentar la complejidad de los ejercicios.

Exponerse a nuevas experiencias: la novedad crea conexiones inéditas en el cerebro. Esto se debe a que la persona tiene que llevar a cabo un proceso de pensamiento para absorber nueva información, comprenderla e incorporarla a lo que ya conoce o sabe.

Un viaje, la salida a un lugar desconocido, la lectura de un nuevo libro o cualquier experiencia que no sea frecuente es bueno para estimular el cerebro, potenciar la inteligencia y mantener la memoria, precisa un artículo de la revista de sicología La Mente es Maravillosa. Mantenerse en la zona de confort solo hace que la mente se vuelva progresivamente más perezosa.

Usar todos los sentidos: según la Escuela de Medicina de Harvard una forma de estimular el cerebro consiste en implicar todos los sentidos en diferentes procesos con la idea de que este órgano retenga varios conceptos y caiga en una especie de adivinanza. A través del olfato, o incluso el tacto, y el gusto el cerebro es capaz de memorizar e identificar rápidamente las cosas.

Confianza en sí mismo: la confianza puede ayudar a aprender cosas nuevas. Las personas que no confían en sí mismas se limitan a lo que aprendieron hasta cierta etapa de sus vidas. Esto lleva a que su capacidad de memoria se vea reducida y, por ello, cuentan con poca agilidad mental. Por esta razón, recuperar la confianza es clave para seguir aprendiendo y ejercitando la memoria.

Eliminar pensamientos negativos: hay muchas formas de eliminar pensamientos negativos de la mente y una de ellas es la meditación y las respiraciones profundas que ayudan a manejar la ansiedad y el estrés, los cuales afectan directamente al cerebro, según un estudio de la Academia Estadounidense de Neurología de 2018.