No sólo son fieles y juguetones, un estudio reciente entre la Universidad de Maryland (EE. UU.) y WALTHAM Centre for Pet Nutrition sugiere que compartir las actividades del día a día con un perro ayuda a controlar la hipertensión en adultos mayores.El estudio publicado en Anthrozoös analizó a un grupo de personas entre 50 a 83 años de edad que padecen de hipertensión arterial leve o moderada y que tenían una mascota. La presión sanguínea se midió automáticamente cada 20 minutos mediante un dispositivo que los participantes portaban mientras realizaban sus actividades cotidianas.Las mediciones se hicieron cada tercer día durante un periodo de estudio de tres meses, en el cual los investigadores vigilaron, además, otros factores diferentes a la presencia de la mascota que pudieran influir en la presión arterial, como la actividad física, el dueño y el estado de ánimo.Los resultados mostraron que tener un perro se asoció a una menor presión sistólica y diastólica. "Bajar la presión sanguínea es la meta terapéutica más importante en el tratamiento de la hipertensión", dijo la autora principal del estudio, Erika Friedmann, profesora de la Universidad de Maryland."Este es el primer estudio que analiza la presión sanguínea en condiciones normales de vida en donde se convive con animales. Nos permitió evaluar el impacto en tiempo real de los animales de compañía en la vida cotidiana de sus dueños", indicó Friedmann. Por otro lado, la autora explicó que "el estudio mejora nuestra comprensión del posible efecto positivo de los perros en la presión sanguínea de quienes padecen hipertensión. Las conclusiones también refuerzan el cuerpo de evidencia creciente que respalda el papel terapéutico que los animales pueden desempeñar al mejorar la salud en general y cardiovascular".Los resultados, según los autores del estudio, sugieren que los perros podrían ser un elemento efectivo en intervenciones a fin de retardar el desarrollo de la hipertensión en adultos mayores.No sólo los dueñosEstudios han demostrado que el solo hecho de estar cerca de gatos disminuye la presión arterial un poco, es más, acariciar un gato la reduce aun más. Aunque los científicos no conocen la razón exacta, se especula que esté ligada a la disminución de los niveles de estrés. La Universidad Estatal de Nueva York (EE. UU.) hizo unos estudios en corredores de bolsa con problemas de hipertensión y descubrió que aquellos a quienes les dieron mascotas tenían menos problemas relacionados con la tensión arterial.Según el estudio que fue publicado en la revista de la Asociación Americana del Corazón (AHA, por sus siglas en inglés), la combinación de mascotas y medicamentos tuvo un mejor efecto sobre las cifras de presión arterial que el uso de medicamentos solos.Pero no sólo la presión sanguínea de los humanos disminuye durante la experiencia de acariciar un gato. Los veterinarios del Centro de Salud Felina Cornell, Andrea Looney y Anna Glazer, les pusieron a estos animales un pequeño brazalete para medir su tensión arterial y, después de ser acariciado por unos minutos, las cifras disminuyeron en 25 puntos. Algunas personas han llevado esta idea más lejos y han desarrollado una floreciente industria de masajes gatunos.Sin embargo, los gatos no se diferencian de otros animales. Los perros han sido los más estudiados en busca de beneficios para la salud de sus dueños. Un examen realizado por el doctor Johannes Odendaal del Instituto de Investigaciones Científicas midió los químicos cerebrales en la gente antes y después de acariciar un perro. Las pruebas encontraron que acariciar a un perro disminuye el nivel de cortisol, sustancia que aumenta durante el estrés. Muchos otros neuroquímicos aumentaron, todos ellos ligados a sentimientos positivos y placenteros.(Lea también: "El mito de los gatos y las embarazadas").Si le gustó o pareció útil esta nota, puede encontrar más información como esta en la nueva Revista 4 Patas: perros y gatos, dedicada a los amigos y amantes de las mascotas. ¡Síganos en las redes sociales! Estamos en:TwitterFacebookGoogle+Instagram