Los individuos que suelen llevar una vida en la que abusan de lo que comen y, a su vez, ejercen el sedentarismo como si fuese un deporte, están en mayor riesgo de padecer de retención de líquidos, como resultado de esto, están almacenando desechos y toxinas en exceso dentro de su cuerpo.

El naturópata, Jesús Domínguez, citad por el portal Elle, explica que “la forma en la que el cuerpo intenta diluirlas (toxinas) es, precisamente, acumulando más líquido. De hecho, cuando nos ponemos a hacer dieta y empezamos a comer mejor, lo primero que perdemos es líquido, debido a que dejamos de retener toxinas”.

La alimentación como lo menciona el profesional es clave para reducir el líquido acumulado dentro del organismo, pero también es pertinente a hacer actividad física que vaya en sintonía con la edad y las condiciones nutricionales de cada paciente.

En medio del proceso, algunas bebidas reseñadas por el portal de salud, Tua Saúde, pueden dar una mano; sin embargo, antes de ingerirlas es pertinente corroborar sus usos con un profesional de la salud.

Infusiones naturales para la retención de líquidos

Té de perejil

Ingredientes:

  • 1 ramo o 15 g de perejil fresco con tallo.
  • 1/4 de limón.
  • 250 ml de agua hirviendo.

Preparación:

  • Lavar y picar el perejil. Después, añadirlo al agua y dejar reposar durante 5 a 10 minutos.
  • Finalmente, colar, dejar entibiar y beber varias veces al día.
  • Esta bebida no debe ser ingerida por mujeres embarazadas, ni por pacientes que estén bajo tratamiento con anticoagulantes u otros diuréticos.

Té de diente de león

Ingredientes:

  • 15 g de hojas y raíces de diente de león.
  • 250 ml de agua hirviendo.

Preparación:

  • Añadir el agua hirviendo en una taza y posteriormente colocar las raíces y dejar reposar durante 10 minutos. Colar y beber de 2 a 3 veces al día. Debe evitarse el uso de esta planta durante el embarazo, así como en personas con problemas en los ductos biliares u oclusión intestinal.
Los pies y las piernas pueden inflamarse por retención de líquidos. | Foto: Getty Images

Té de cola de caballo

Ingredientes:

  • 1 cucharada cafetera de cola de caballo.
  • 250 ml de agua hirviendo.

Preparación:

  • Añadir la cola de caballo en la taza con agua hirviendo y dejar reposar entre 5 a 10 minutos
  • Después colar, dejar entibiar y beber 3 veces al día.
  • El medio recomienda hacer uso de esta planta solo por 7 días continuos, para evitar el desequilibrio de minerales.
  • Además, este té no debe utilizarse en embarazadas o mujeres que se encuentran lactando.

Té de flor de Jamaica

Ingredientes:

  • 2 cucharadas de flores de Jamaica secas.
  • 1 litro de agua hervida.

Preparación:

  • Añadir la flor de Jamaica en el agua caliente y dejar reposar durante 10 minutos, debidamente tapado. Colar y beber a lo largo del día.
  • Aunque sea bastante segura, esta planta debe evitarse durante el embarazo y lactancia.

Té de hinojo

Ingredientes:

  • 1 cucharada cafetera de semillas de hinojo.
  • 1 taza con agua hirviendo.

Preparación:

  • Añadir las semillas al agua hirviendo en una taza y dejar reposar durante 5 a 10 minutos.
  • Posteriormente, colar y beber hasta 3 veces al día.
El edema se genera por una hinchazón generada por los líquidos que se quedan atrapados en los tejidos. | Foto: Getty Images

Té verde

Ingredientes:

  • 1 cucharada sopera de hojas de té verde.
  • 1 taza con agua hirviendo.

Preparación:

  • Colocar las hojas de té verde en una taza y posteriormente añadir el agua, dejando reposar entre 3 a 5 minutos.
  • Después colar, dejar entibiar y beber hasta 3 veces al día.
  • Dependiendo del tiempo que deje el té reposando, mayor será la cantidad de cafeína, y, por lo tanto, mayor será el sabor amargo. De esta forma se recomienda dejar reposar durante 3 minutos y después ir probando cada 30 segundos hasta que sienta el punto con mejor sabor.