El sobrepeso y la obesidad se definen como una acumulación anormal o excesiva de grasa que puede ser perjudicial para la salud. El índice de masa corporal (IMC) es un indicador simple de la relación entre el peso y la talla que se utiliza frecuentemente para identificar el sobrepeso y la obesidad en los adultos, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
En el caso de los adultos, la OMS define el sobrepeso y la obesidad como se indica a continuación:
- Sobrepeso: IMC igual o superior a 25.
- Obesidad: IMC igual o superior a 30.
En consecuencia, el Ministerio de Salud explica en su página web que para saber si una persona está en un peso saludable existen algunos métodos confiables. Uno es la determinación del índice de masa corporal (IMC), que describe la relación entre peso y estatura.
Para calcular el IMC se necesita conocer el peso y la estatura, y se aplica una sencilla fórmula matemática que consiste en dividir el peso entre la estatura al cuadrado: IMC = Peso (Kg) / Estatura al cuadrado (Mt).
Ejemplo: Una persona pesa 64 Kg y mide 1.5 metros, entonces: 64 / 1.5 x 1.5 = 28.44. Este dato indica el IMC de la persona (28.44) se encuentra en los valores correspondientes a sobrepeso.
Esta formula no aplica a mujeres en estado de embarazo y debe ser ajustada si la persona tiene algún grado de edema (retención de líquido).
El Ministerio también reveló que otro método que puede utilizarse es la circunferencia de la cintura, que es una medida útil para determinar los riesgos de salud relacionados con el peso. Se ha estudiado que la concentración de la grasa en la parte de la cintura y abdomen se asocia a un mayor riesgo de sufrir de enfermedades cardiovasculares.
Esta medida se toma buscando el punto más alto de los huesos de la cadera y midiendo la cintura por encima de esos puntos.
Por ello, se considera obesidad abdominal si una persona:
• Es mujer y tiene una medida de circunferencia de cintura mayor a 80 cm
• Es hombre y tiene una medida de circunferencia de cintura mayor a 90 cm.
Por tal razón, el médico internista y endocrinólogo, Iván Escobar, en diálogo con Gestarsalud reveló algunos tips para combatir la obesidad.
1. Comer saludable. Una alimentación balanceada y saludable debe tener frutas, verduras, proteínas, grasas, carbohidratos y todos los nutrientes que el cuerpo necesita. No obstante, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), la composición exacta de una alimentación variada, equilibrada y saludable estará determinada por las características de cada persona (edad, sexo, hábitos de vida y grado de actividad física), el contexto cultural, los alimentos disponibles en el lugar y los hábitos alimentarios.
2. Evitar los productos ultraprocesados. Dentro de este grupo se encuentran las bebidas azucaradas, carnes procesadas, galletas, lácteos azucarados, postres, dulces, cereales refinados, pizzas, nuggets, entre otros.
3. Realizar actividad física. Las nuevas directrices de la OMS recomiendan por lo menos de 150 a 300 minutos de actividad física aeróbica de intensidad moderada o vigorosa por semana para todos los adultos, incluidas las personas que viven con afecciones crónicas o discapacidad, y un promedio de 60 minutos al día para los niños y adolescentes.
4. Dormir bien. El sueño es esencial para gozar de una salud óptima y lo que recomiendan los expertos es dormir entre siete y ocho horas por la noche.
5. No creer en recetas mágicas. En otras palabras, las fórmulas fáciles, las dietas mágicas y los resultados rápidos no existen. Todo es cuestión de tiempo y perseverancia. Cada persona es diferente y por tal razón cada proceso es individual.
No obstante, algunos pacientes no responden de forma adecuada a los cambios saludables en el estilo vida y es posible que reúnan las condiciones para someterse a las siguientes intervenciones quirúrgicas, según el Instituto Nacional del Corazón, Pulmón y Sangre de Estados Unidos.