Si ha notado que en ocasiones se le olvidan cosas muy simples o le cuesta concentrarte, debe tener en cuenta que los estados de estrés o ansiedad reducen la agilidad mental. Además, incluso una alimentación inadecuada puede ocasionar problemas en ese sentido.

Es importante recordar que el cerebro es un músculo y, como cualquier músculo, puede ejercitarse y desarrollarse, como también puede atrofiarse. Por ello, mejorar la memoria siempre es posible y con los siguientes pasos sabrá como hacerlo.

1. Lleve una adecuada alimentación

Seguir una alimentación adecuada es básico para tener buena memoria y por ello, lo ideal es empezar a incluir en sus platos las siguientes frutas y verduras: plátano, nueces, manzana, salmón, brócoli, espinacas, linaza, germen de trigo, ajo, cebollas, espárragos, avena, lentejas, pimientos y cítricos.

Seguir una alimentación adecuada es básico para tener buena memoria | Foto: Gary Burchell

2. Evitar la rutina

Un enemigo peligroso para la memoria es la rutina. Al hacer cada día lo mismo y seguir las mismas pautas, semana tras semana, hace que nuestro cerebro deje de recibir estímulos, incentivos y motivación. La monotonía provoca que el procesamiento de la información se vuelva más lento y que nos cueste más fijar datos e informaciones.

La solución es hacer algo diferente cada día, pues está claro que todos tenemos que seguir una rutina debido a nuestras obligaciones, pero es importante darse un respiro de, al menos, dos horas.

3. Realizar ejercicios mentales

Proponga sus propios juegos de memoria. Por ejemplo, cuente los escalones que hay en su oficina, en el colegio, en el gimnasio. Cuando vea una matrícula intente recordarla y evocarla dos horas después. Memorice el número de los móviles de sus amigos o familiares. Por otra parte, también puede memorizar un poema o una canción e intente recordarlas al día siguiente.

Proponte tus propios juegos de memoria | Foto: Getty Images

4. Enfoque su atención en lo que está haciendo

En ocasiones, hacemos las cosas de modo automático: nos levantamos, nos peinamos, desayunamos y salimos de casa. Cada persona ha programado una rutina en el diario vivir. Buscar el móvil y las llaves del carro ya se han convertido en algo normal en nuestras actividades.

Sin embargo, realizar todo de manera tan monótona no les permite a las personas estar conscientes del resultado de sus acciones en muchas ocasiones. De ahí la importancia de priorizar el “aquí y ahora”. Así, se evidenciará cómo la memoria puede mejorar con el paso de tiempo.

5. Cuando quiera recordar algo, visualícelo

Imagine que quiere recordar dónde dejó las llaves de la casa para no perderla cuando las necesite. Para ello, es recomendable imaginar que las dejó en la silla, en la mesa o en cualquier lugar del hogar. Otro caso, puede ser recordar el cumpleaños de una amigo, para ello se recomienda visualizarse mientras se escribe la fecha en el calendario. Visualizar es la mejor manera de recordar; de hecho, la memoria es más eficaz si se acompaña de un refuerzo visual o una imagen.

Pensar | Foto: Pensar activa la mente

6. Sí a las asociaciones de memoria

La memoria funciona por asociaciones. Un ejemplo de ello, que seguramente les ha ocurrido a muchos, es oler algo y de inmediato recordar algún momento de la vida. Lo mismo ocurre con escuchar una canción y evocar de inmediato una palabra, una sensación o una imagen del pasado.

Si quiere recordar su próxima cita médica, haga alguna asociación con ella. Por ejemplo: Día 10 a las 9 horas (puede pensar en los diez dedos de la mano y en la edad de algún familiar joven)

7. Organizar la información

La memoria es mucho más eficaz cuando organizamos los datos que se quieren recordar. Por ejemplo, si va al supermercado y se olvida la lista de compra, se puede visualizar la cocina y los estantes de la misma haciendo un recorrido por cada sección.

Este sencillo ejercicio puede permitir recordar mejor cada artículo que se necesita, relacionándolo con la categoría que pertenecen.