La tiroides es una pequeña glándula en forma de mariposa ubicada en la parte delantera del cuello, la cual produce hormonas que controlan cómo el cuerpo usa la energía. Estas hormonas afectan a casi todos los órganos y controlan muchas de las funciones más importantes; por ejemplo, afectan la respiración, la frecuencia cardiaca, el peso, la digestión y los estados de ánimo, de acuerdo con Medline Plus, de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
En consecuencia, los problemas tiroideos incluyen: bocio, que es cuando hay agrandamiento de la tiroides; hipertiroidismo, que es cuando la glándula tiroides produce más hormonas tiroideas de las que el cuerpo necesita; hipotiroidismo, que es cuando la glándula no produce suficiente hormona tiroidea; cáncer de tiroides; nódulos, que es cuando aparecen bultos en la tiroides, y tiroiditis, que es cuando se presenta hinchazón de la tiroides.
Por tal razón, el tratamiento depende del problema, pero puede incluir medicamentos, terapia con yodo radiactivo o cirugía de tiroides.
No obstante, el portal Mejor con Salud reveló cuatro hábitos alimenticios para mejorar la salud tiroidea y el primero es incluir yodo en la dieta, pues este alimento ayuda a la producción de la hormona tiroidea. El yodo se encuentra naturalmente en algunos alimentos como el pescado, las algas marinas, los camarones y otros mariscos; los productos lácteos como leche, yogur y queso, entre otros.
La siguiente recomendación es comer arándanos, pues evitará las inflamaciones por su propiedades. Además, el diario ABC de España, con el aval de la dietista-nutricionista de Alimmenta Julia Farré, detalló que la composición nutricional de 100 gramos de arándanos habla por sí misma, ya que tiene 30 kilocalorías, 89 gramos de agua, 0,6 gramos de proteína, 6,9 gramos de hidratos de carbono, 0,2 gramos de grasa, 1,8 gramos de fibra, 0,5 gramos de hierro, 88 miligramos de potasio, 6 microgramos de ácido fóolico, 3 miligramos de sodio, 5 microgramos de vitamina A y 17 miligramos de vitamina C.
La siguiente sugerencia del portal es consumir papa, pues este tubérculo tiene yodo, pero para obtener sus beneficios lo recomendado es consumirlo al horno o cocido y que esté acompañado de verduras.
La última recomendación es consumir alimentos naturales y no procesados. De hecho, de acuerdo con Medline Plus, la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos, hay cinco grupos básicos principales de alimentos que conforman una dieta saludable:
- Granos: procurar que al menos la mitad de los granos sean integrales.
- Verduras: procurar que la mitad del plato sea de verduras.
- Frutas: pueden ser frescas, enlatadas, congeladas o secas.
- Proteínas: Los alimentos de proteínas incluyen carne de res, carne de aves, mariscos, frijoles y arvejas, huevos, productos de soya procesados, nueces y mantequillas de nueces, y semillas.
No obstante, la composición exacta de una alimentación variada, equilibrada y saludable estará determinada por las características de cada persona (edad, sexo, hábitos de vida y grado de actividad física), el contexto cultural, los alimentos disponibles en el lugar y los hábitos alimentarios, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Sin embargo, lo primero que hay que hacer es consultar a un experto de la salud para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona y con eso se evitan las contraindicaciones por el mal uso de algunas de las recetas caseras.
Hay que señalar que para el diagnóstico de enfermedades de la tiroides, los médicos usan la historia clínica del paciente, un examen físico y pruebas para la tiroides. A veces, también utilizan una biopsia y el tratamiento depende del problema, pero puede incluir medicamentos, terapia con yodo radiactivo o cirugía de tiroides.