El tomate de árbol es un fruto que aporta varios beneficios a la salud, entre los que se destacan mejorar la visión y la apariencia de la piel.
De hecho, el portal portugués de salud, nutrición y bienestar, Tua Saúde, reveló que “el tomate de árbol aporta vitamina A, un micronutriente que es importante para la salud visual”.
Adicional, la vitamina A se utiliza en cremas tópicas para reducir las arrugas finas, las manchas y las asperezas en la piel, y para tratar el acné, según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Asimismo, Tua Saúde indicó en su portal web que “el tomate de árbol es rico en compuestos con propiedades antioxidantes, como la vitamina A y C y polifenoles que ayudan a neutralizar el daño que causan los radicales libres a las células. Además, estos compuestos también ayudan a cuidar la piel por lo que previene la formación de arrugas y evita la flacidez de la piel”.
Sobre la misma línea, otras propiedades del tomate de árbol incluyen que “es rico en compuestos fenólicos, flavonoides, antocianinas y carotenoides, así como en vitaminas y minerales que le otorgan sus propiedades antioxidantes, antiinflamatorias, antimicrobianas, hipolipemiantes, quimioprotectoras e hipoglucémicas”.
De igual forma, este fruto aporta otros beneficios como: vitamina B6, vitamina C y vitamina E y minerales como el calcio, el hierro, el fósforo y el magnesio.
Respecto al consumo, el portal portugués señaló que puede “consumirse entero, en forma de jugo, conservas o en mermeladas”.
Asimismo, señaló que “el tomate de árbol se puede incluir en la alimentación diaria como cualquier otra fruta, debiendo preferirse entero. La recomendación diaria de frutas en general es de dos a tres porciones al día. El tamaño de la porción recomendada de tomate de árbol es de 100 gramos aproximadamente, lo que equivale a una unidad y 1/2″.
Información nutricional por cada 100 gramos de tomate de árbol
- Calorías: 58 calorías.
- Proteínas: 1,7 g.
- Lípidos: 0,1 g.
- Carbohidratos: 12,5 g.
- Fibras: 2 g.
- Vitamina B1: 0,06 mg.
- Vitamina B2: 0,03 mg.
- Vitamina B3: 0,3 mg.
- Vitamina C: 23 mg.
- Vitamina A: 155 ER.
- Calcio: 10 mg.
- Hierro: 0,8 mg.
- Sodio: 1 mg.
- Fósforo: 43 mg.
- Zinc: 0,1 mg.
- Magnesio: 19 mg.
- Potasio: 300 mg.
Orígenes del tomate de árbol
El tomate de árbol, cuyo nombre científico es solanum betaceu, es un fruto originario de América del Sur y, de acuerdo con la Cámara de Comercio de Bogotá, se cree que su centro de origen está ubicado en los bosques de la reserva de Tucumano entre Bolivia y el norte de Argentina, ya que en dicha zona se ha encontrado una alta diversidad genética.
Además, el cultivo de tomate de árbol se desarrolla más eficientemente en clima frío moderado, con temperaturas que oscilan entre los 13 °C a 20 °C (grados centígrados); temperaturas superiores a los 25 °C, e inferiores a los 10 °C durante el período de floración generan caída de la flor y afectan el cuajado del fruto.
Asimismo, hay que señalar que el tomate de árbol es de sabor agridulce, pudiendo encontrarse con la corteza roja y la pulpa anaranjada o con la corteza amarilla y la pulpa amarilla.
De todos modos, antes de consumir algún alimento lo primero que hay que hacer es consultar al médico tratante o a un nutricionista para que sea este quien guíe el proceso e indique qué es lo más adecuado para cada persona, pues las anteriores recomendaciones no son las indicadas para todas las personas, ya que la información antes dada de ninguna manera sustituye la asesoría médica.