La persona que padece de este trastorno suda, se siente inquieta, tensa y comienza a sentir palpitaciones en el momento en el que presenta la crisis o el episodio de ansiedad. La ansiedad puede ser una reacción normal al estrés; por ejemplo, una persona puede sentirse ansiosa cuando se enfrenta a un problema difícil en el trabajo, antes de tomar un examen o antes de tomar una decisión importante, así lo explicó el portal de salud y medicina Medlineplus.
Pese a los molestos síntomas que genera, la ansiedad puede ayudar a enfrentar una situación, además de dar un impulso de energía o ayudar a mejorar la concentración. Para las personas con trastornos de ansiedad, el miedo no es temporal y puede ser un episodio bastante incómodo y abrumador.
Cuando una persona presenta este tipo de trastornos, la ansiedad no desaparece pronto e incluso puede permanecer con el tiempo y aparecer con frecuencia; los síntomas pueden llegar a ser más agudos y pueden interferir con las actividades diarias, como en el desempeño en el trabajo, la escuela y en las relaciones personales.
Aún se desconocen las causas que pueden generar este tipo de afecciones; sin embargo, pueden influir factores como la genética, la biología y la química del cerebro, el estrés y el entorno en donde se encuentra la persona.
Tipo de ansiedad
- Trastorno de ansiedad generalizada: las personas con este trastorno se preocupan cuando ellos o sus familiares presentan problemas comunes como de salud, dinero, trabajo y complicaciones que surgen de las relaciones personales; sin embargo, estas preocupaciones son excesivas, las tienen casi todos los días y puede durar al menos 6 meses.
- Trastorno de pánico: las personas con este trastorno sufren de ataques de pánico. Estos son repentinos y repetitivos generan un miedo intenso sin haber un peligro aparente. Los ataques se producen rápidamente y pueden durar varios minutos o más.
- Fobias: las personas con fobias tienen un miedo intenso a algo que representa poco o ningún peligro real. Su miedo puede ser ante la presencia de arañas, o a viajar en avión, ir a lugares concurridos o estar en situaciones sociales (conocida como ansiedad social).
Síntomas de la ansiedad
- Pensamientos o creencias ansiosas difíciles de controlar: hacen que la persona se sienta inquieto y tenso e interfieren con su vida diaria. No desaparecen y pueden empeorar con el tiempo.
- Cambios en el comportamiento, como evitar las actividades cotidianas que solía hacer y que generaban gusto y ahora no.
- El uso de cafeína, otras sustancias y ciertos medicamentos pueden empeorar los síntomas.
Tratamiento para la ansiedad
- La terapia cognitiva conductual se usa para tratar los trastornos de ansiedad y enseña al paciente diferentes formas de pensar y comportarse; con el fin de ayudarlo a cambiar cómo reacciona ante las cosas que le causan miedo y ansiedad. Puede incluir terapia de exposición, la que se enfoca en confrontar sus miedos para que pueda hacer las cosas que ha estado evitando.
- Los medicamentos para tratar los trastornos de ansiedad incluyen medicamentos contra la ansiedad y ciertos antidepresivos. Algunos tipos de fármacos pueden funcionar mejor para tipos específicos de trastornos de ansiedad. En algunos casos los pacientes deben probar varios medicamentos hasta encontrar el más adecuado para tratar los síntomas; jamás se deben adquirir sin consultar con un médico psiquiatra quien es el especialista encargado de recetar medicamentos para este tipo de trastornos.
Alimentos que se deben evitar si se padece de ansiedad
El diario La Vanguardia menciona unos alimentos que es mejor evitar si se padece de ansiedad.
- Galletas: la nutricionista de BluaU, Natalia Galán, explicó que estos alimentos “crean adicción al dulce y son los que más se relacionan con este trastorno”. La nutricionista recomienda optar por alimentos como frutas o alimentos con fibra para ayudar a calmar esos momentos de ansiedad.
- Café: según Galán, “la cafeína es un excitante y cuando tenemos ansiedad no es recomendable consumir sustancias que puedan aumentar nuestro nerviosismo”.
- Alcohol: este puede ayudar a mejorar momentáneamente un cuadro de ansiedad, provocando cierta desconexión e incluso euforia. Sin embargo, Galán aseguró que el alcohol actúa como depresor del sistema nervioso, de manera que no solo no disminuirá la ansiedad, sino que probablemente la agrave.