La manzana es una de las frutas con mayor beneficio para los seres humanos. Debido a su composición, la manzana es un poderoso coctel de nutrientes, que hacen la fruta una de las más rentables, pues es un alimento que puede conservarse sin perder cualidades.
La manzana es una de las frutas más ricas en fibra, pues cada 100 gramos de manzana, 2.4 son de pura fibra, algo realmente positivo pues la fibra se encarga de regular el tránsito intestinal y evitar el estreñimiento.
Por otro lado, da la sensación de estar saciado, esto ocurre gracias a la pectina, que es la sustancia que se encuentra en la pulpa. Cuando esta llega al estómago, desencadena mecanismos de información dirigidos al cerebro que indican que ya se está lleno. Cabe resaltar que la presencia de dicha sustancia podría tener beneficios en los niveles de colesterol en la sangre.
Según un estudio realizado por el departamento de Nutrición de la Universidad de Florida, la pectina y antioxidantes pertenecientes a la piel de la manzana son fundamentales para eliminar las toxinas del cuerpo. Además, protege al corazón, pues según investigaciones del famoso nutricionista estadounidense, Arjmandi, el consumo de manzana disminuye el ‘colesterol malo’
Otro de los beneficios de la fruta es que estabiliza el azúcar en la sangre. Gracias a su alto contenido en fibra. Además, cabe resaltar que es un alimento rico en vitamina C y A, al igual que en potasio.
Por otro lado, según la Universidad de Massachusetts, el jugo de la manzana puede aumentar la producción de acetilcolina, un neurotransmisor que beneficia la memoria.
La manzana también es conocida por sus propiedades tranquilizadoras. De ahí los productos como el aceite esencial de manzana, que es usado en aromaterapia que tiene un alto poder relajante.
Así se puede consumir para reducir el riesgo de padecer diabetes
La diabetes es “una enfermedad crónica que aparece cuando el páncreas no produce insulina suficiente o el organismo no utiliza eficazmente la insulina que produce”, explica la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Añade que con el paso del tiempo una diabetes no controlada daña gravemente distintos órganos y sistemas del cuerpo, especialmente los nervios y vasos sanguíneos.
De acuerdo con el Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales (NIDDK, por sus siglas en inglés), la diabetes afecta a una de cada cuatro personas mayores de 65 años de edad en Estados Unidos. Además, entre el 90 % y 95 % de los casos en adultos corresponden a la diabetes tipo 2. En la diabetes tipo 2 el cuerpo no puede producir o usar bien la insulina presente.
La diabetes es conocida como una enfermedad silenciosa, puesto que no siempre presenta síntomas, aunque esto depende del tipo de diabetes que la persona haya desarrollado y de la etapa de la patología.
Asimismo, la entidad de salud Sanitas señala que “en su fase inicial la diabetes tipo 2 generalmente no produce síntomas y suele ser diagnosticada tras la realización de una analítica clínica rutinaria”. No obstante, hay un momento de la enfermedad en que el organismo comienza “a expresar el hecho de que la glucosa no llegue en cantidades suficientes a las células de los diferentes tejidos y empiece a acumularse en la sangre”, añade.
Para combatir y reducir el riesgo de padecer esta enfermedad existen algunos métodos, el más eficaz es llevar una alimentación saludable evitando los productos cargados de azúcar.
De igual manera, diversas frutas le suministran al organismo distintos nutrientes que también ayudan a prevenir la diabetes y, según el portal Viva mi Salud, una de estas es la manzana, pero se debe consumir en su estado natural para aprovechar todos sus minerales.
La fibra y sus compuestos vegetales como polifenoles son las principales sustancias que tienden a reducir el azúcar en la sangre.