De acuerdo con información de la enciclopedia médica MedlinePlus, la inflamación o distensión abdominal, por lo general, ocurre cuando una persona ha comido en exceso. Sin embargo, también puede ser síntoma de algunas enfermedades, por lo que es conveniente acudir a un médico especialista para recibir un diagnóstico preciso y definir el tratamiento adecuado.
En el caso de que la hinchazón haya sido producida por comer en exceso o haber ingerido un alimento pesado, esta desaparecerá cuando dicha comida haya sido digerida. Por esta razón, una opción útil para prevenir la distensión abdominal es comer porciones más pequeñas.
Otra causa frecuente por la que el vientre puede hincharse es por deglutir aire, es decir, por el paso de aire hacia el estómago a través de la garganta. Para prevenir este escenario, MedlinePlus sugiere evitar las bebidas carbonatadas, evitar masticar chicle, chupar dulces y comer lentamente.
En otros casos, la distensión abdominal es causada por malabsorción, es decir, problemas con la habilidad del cuerpo para asimilar los nutrientes provenientes de los alimentos. Es este escenario resulta conveniente consultar con un médico para identificar qué tipo de comida está derivando en la hinchazón del vientre.
Otra causa común es el síndrome del intestino irritable. Como tratamiento casero, se recomienda disminuir el estrés emocional, aumentar el consumo de fibra en la dieta y acudir a un médico para recibir atención especializada.
Infusiones para desinflamar el abdomen
La medicina alternativa contempla algunos remedios caseros que pueden ayudar a desinflamar el abdomen en ciertos casos. No obstante, estas opciones no sustituyen el tratamiento médico, por lo que es recomendable consultar previamente con un profesional de la salud.
El portal Mundo Deportivo reseña algunas recetas para preparar infusiones que pueden ayudar a aliviar la distensión abdominal.
1. Infusión de anís e hinojo
De acuerdo con el portal especializado Cuerpomente, el hinojo es una planta con múltiples propiedades medicinales. Mientras que sus semillas contienen anetol, estragol y alfapineno, sus hojas poseen flavonoides y su raíz tiene cumarinas.
En su conjunto, al hinojo se le atribuyen efectos para equilibrar las funciones del sistema digestivo, además, es considerado como un expectorante y antiinflamatorio natural.
El anís, por su parte, es una hierba con propiedades antibacterianas y antifúngicas; el denominado anís estrellado suele usarse para aliviar la congestión y limpiar las vías respiratorias. Adicionalmente, posee cualidades que ayudan a eliminar los gases, pues tiene efectos antiinflamatorios.
Ingredientes:
- 250 ml de agua.
- Una cucharada de anís verde o estrellado.
- Una cucharada de hinojo.
Preparación:
En primer lugar, se debe poner a hervir el agua. Una vez alcance su punto de ebullición, se agrega el hinojo y el anís. Luego, se deja al fuego durante unos diez minutos para que infusione y se retira para dejar reposar otros diez minutos.
Finalmente, la infusión debe colarse y puede consumirse después de las comidas principales.
2. Infusión de manzanilla con anís
Las propiedades medicinales del anís también pueden complementarse con la manzanilla. Las hojas de esta planta se han usado tradicionalmente para tratar trastornos digestivos, como dolor de estómago, indigestión, dispepsia, cólicos y diarreas. También ha sido aplicada a remedios naturales para afecciones renales y de la vejiga.
Ingredientes:
- 250 ml de agua.
- Una cucharada de anís verde o estrellado.
- Una cucharada de manzanilla.
- Miel al gusto.
Preparación:
Se pone a hervir el agua y, cuando alcance su punto de ebullición, se incorporan la manzanilla y el anís. Se deja diez minutos al fuego, se retira y se deja reposar durante el mismo tiempo.
La miel se puede integrar al final para endulzar un poco la infusión antes de consumirse.
3. Infusión de jengibre y cardamomo
La tercera infusión compartida por Mundo Deportivo en su portal web se basa en las propiedades del jengibre y el cardamomo, una especie bastante utilizada en Guatemala. Dentro de sus beneficios destacan efectos expectorantes y anticongestivos, además de favorecer la digestión y aliviar trastornos digestivos.
El jengibre, por su parte, es otro ingrediente por excelencia de la medicina natural. Tradicionalmente, se ha utilizado para ayudar a la digestión, aliviar síntomas como las náuseas y ayudar a combatir la gripa.
Ingredientes:
- 250 ml de agua.
- Una cucharada de cardamomo fresco o en polvo.
- Una cucharada de jengibre fresco o en polvo.
- Una rama de canela.
Preparación:
Se pone a hervir el agua y, cuando alcance su punto de ebullición, se incorporan el jengibre y el cardamomo. Se deja diez minutos al fuego, se retira y se deja reposar durante el mismo tiempo.
Finalmente, la infusión debe ser colada antes de beber.