Es natural que la piel presente un deterioro con el paso de los años, sin embargo, existen hábitos que pueden desacelerar este proceso de envejecimiento, lo que le permite a las personas lucir una piel sana y joven durante un tiempo prolongado.

Los expertos aconsejan mantener un estilo de vida saludable para lucir más joven; también es importante tener en cuenta algunos hábitos como la buena alimentación, que contribuye a la salud de la piel.

Otro aspecto fundamental en el cuidado de la piel es la hidratación. El consumo de agua a diario es indispensable para mantener fresca y sana la piel. Los expertos señalan que se debe beber la cantidad suficiente de agua, según las necesidades de cada organismo.

Asimismo, el portal Mayo Clinic, indica que para tener una piel más saludable se debe dejar de fumar, ya que la nicotina hace que los vasos sanguíneos se achiquen, lo que reduce el flujo de oxígeno y los nutrientes a las células de la piel.

Es natural que la piel presente un deterioro con el paso de los años, sin embargo, existen hábitos que pueden desacelerar este proceso de envejecimiento. | Foto: Getty Images

La aparición de las arrugas se debe a que, con el tiempo, se disminuye la producción de colágeno, queratina y elastina en el cuerpo, las cuales aportan propiedades para que la piel luzca joven y saludable.

“La exposición frecuente a los rayos solares provoca la aparición precoz de arrugas y zonas oscuras en la piel (manchas por la edad). Igualmente, incrementa las probabilidades de desarrollar cáncer en la piel. La exposición al humo del cigarrillo también puede llevar a que la piel se arrugue con más rapidez”, indica Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.

Hábitos que retrasan el envejecimiento de la piel

  • Usar protector solar. Utilizar un protector solar de amplio espectro que tenga un factor de protección solar de, al menos, 15, y aplicarlo cada dos horas o con más frecuencia si se está nadando o transpirando.
  • Buscar lugares con sombra. Evitar el sol entre las 10 de la mañana y las 4 de la tarde, ya que es cuando los rayos solares son más intensos.
  • Usar ropa de protección. Utilizar prendas de manga larga, pantalones largos y sombreros de ala ancha.
Utilizar un protector solar de amplio espectro que tenga un factor de protección solar de, al menos, 15. | Foto: Jamie Grill Photography

Evitar malos hábitos como fumar

Es importante evitar hábitos perjudiciales para la salud de la piel. Fumar es uno de ellos. Además de incrementar el riesgo de padecer cáncer de pulmón, esta práctica ayuda a la aparición prematura de las arrugas.

“Fumar puede acelerar el proceso de envejecimiento normal de la piel, lo que contribuye a la formación de arrugas y a otros cambios en el aspecto del rostro. Estos cambios incluyen patas de gallo, líneas pronunciadas entre las cejas, un cutis desparejo, un tono grisáceo en la piel más clara, surcos profundos e hinchazón debajo de los ojos, arrugas alrededor de la boca y labios más finos”, detalla Mayo Clinic.

Es importante evitar hábitos perjudiciales para la salud de la piel. | Foto: Getty Images

Hidratación

No importa si la piel es seca, normal, o grasosa, conservar la hidratación de la piel es fundamental para su cuidado. Rhoda Narins, de la Sociedad Americana de Cirugía Dermatológica, citada en el portal Woman Time, asegura que “a veces lo único que necesitas es una buena crema hidratante y un limpiador suave para quitarle años a tu cara”.

Se trata de un producto que no puede hacer falta dentro de la rutina, más si se quiere tener una piel sana durante la edad adulta. En ese sentido, se aconseja empezar a usarlas a partir de los 20 y 30 años, para así mitigar la aparición de los signos del envejecimiento sobre la piel.

La hidratación de la piel es fundamental para su cuidado. | Foto: Libre de derechos

Para escoger la crema hidratante adecuada para el tipo de piel se debe tener en cuenta que tan propensa es a la resequedad o a ser grasosa. Según esta característica, el portal Biobiochile explica que se debe optar por una crema tipo sérum, gel o acuosa, de fácil absorción, si la piel es con tendencia a ser más grasa; en cambio, para las pieles resecas es preferible utilizar cremas humectantes, con componentes como el ácido hialurónico.