Los triglicéridos son una medición importante de la salud del corazón, de acuerdo con Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación.
Además, explicó que los triglicéridos son un tipo de grasa (lípidos) que se encuentran en la sangre, y cuando se come, el cuerpo convierte todas las calorías que no necesite usar de inmediato en triglicéridos y estos se almacenan en las células grasas para, más tarde, las hormonas liberar triglicéridos y obtener energía entre las comidas.
Por ello, si se ingieren regularmente más calorías de las que se quema, en particular de alimentos ricos en carbohidratos, se pueden tener los triglicéridos altos (hipertrigliceridemia).
Así las cosas, un análisis de sangre puede revelar si los triglicéridos están dentro de un rango saludable:
- Normal: menos de 150 miligramos por decilitro (mg/dl), o menos de 1,7 milimoles por litro (mmol/l)
- Límite: 150 a 199 mg/dl (1,8 a 2,2 mmol/l)
- Alto: 200 a 499 mg/dl (2,3 a 5,6 mmol/L)
- Muy alto: 500 mg/dl o más (5,7 mmol/l o más)
Ahora bien, los triglicéridos altos pueden contribuir al endurecimiento de las arterias o al engrosamiento de las paredes arteriales (arterioesclerosis), lo que aumenta el riesgo de sufrir accidente cerebrovascular, ataque cardíaco y cardiopatías. Los triglicéridos extremadamente altos también pueden causar inflamación aguda del páncreas (pancreatitis).
Asimismo, los triglicéridos altos a menudo son un signo de otras afecciones que aumentan el riesgo de sufrir enfermedad cardíaca y accidente cerebrovascular, incluyendo la obesidad y el síndrome metabólico, un grupo de condiciones, entre ellas, demasiada grasa alrededor de la cintura, hipertensión arterial, triglicéridos altos, hiperglucemia y niveles anormales de colesterol.
Adicional, según la entidad sin ánimo de lucro, los triglicéridos altos también pueden ser un signo de:
- Diabetes tipo 2 o prediabetes.
- Síndrome metabólico: una afección en la que la hipertensión arterial, la obesidad y la hiperglucemia se presentan juntas, lo que aumenta el riesgo de sufrir enfermedad cardíaca.
- Niveles bajos de hormonas tiroideas (hipotiroidismo).
- Ciertas afecciones genéticas poco comunes que afectan la forma en que el cuerpo convierte la grasa en energía.
Algunas veces, los triglicéridos altos son un efecto secundario de tomar ciertos medicamentos, como los siguientes:
- Diuréticos.
- Estrógeno y progestágeno.
- Retinoides.
- Esteroides.
- Betabloqueantes.
- Algunos inmunosupresores.
- Algunos medicamentos para el VIH.
En consecuencia, si se tienen los triglicéridos altos, una recomendación del portal Healthline es realizar ejercicio y la Organización Mundial de la Salud (OMS), sugiere realizar actividades físicas aeróbicas moderadas durante al menos 150 a 300 minutos o actividades físicas aeróbicas intensas durante al menos 75 a 150 minutos, o una combinación equivalente de actividades moderadas e intensas a lo largo de la semana.
“La actividad física es fundamental para la salud y el bienestar, ya que puede ayudar a añadir años a la vida y vida a los años”, dijo el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Entre las actividades físicas más comunes se destacan: caminar, montar en bicicleta o correr y todas ellas se pueden realizar con cualquier nivel de capacidad y para disfrute de todos.
Por su parte, el portal de salud Clikisalud.net de la Fundación Carlos Slim reveló varios consejos que ayudan a bajar los niveles de forma natural:
1. Evitar el azúcar y los carbohidratos refinados: los carbohidratos simples, como el azúcar y los alimentos hechos con harina blanca o fructosa, pueden aumentar los triglicéridos.
2. Reducir el consumo de alcohol: el alcohol es alto en calorías y azúcar, y tiene un efecto particularmente fuerte sobre los triglicéridos.
3. Elegir grasas saludables y eliminar las grasas saturadas: reemplazar las grasas saturadas que se encuentran en las carnes por grasas más saludables que se encuentran en las plantas, como los aceites de oliva y colza (canola). En lugar de carne roja la persona puede probar pescado rico en ácidos grasos omega 3, como la caballa o el salmón.
4. Aumentar el consumo de verduras y fibra.