Irse de viaje es uno de los mejores planes, pero también es algo que atemoriza a algunos, pues el conocer nuevos destinos, otras culturas y sus delicias gastronómicas, puede atormentar a quienes están buscando descansar, disfrutar y probar sin subir de peso.
Y es que parece difícil resistirse a las delicias que puede ofrecer un destino nuevo, por lo que hay que tener en cuenta ciertos pasos para comer sin remordimientos y evitar ganar algunos kilos.
Consejos para comer y no engordar durante las vacaciones
Lo primero que se debe hacer es pesarse antes de emprender la aventura, pues será necesario tener una medida de referencia; hágalo en la báscula de su casa y solo repítalo cuando regrese al hogar, pues hay dos razones para no intentarlo en ninguna otra.
La primera es que la pesa de la casa es la que siempre se utiliza y es con la que se lleva el control del peso; ya está configurada y es con la que regularmente se obtienen los datos que le dan una idea sobre cómo está su salud, mientras que una báscula extraña, configurada de otra forma, le puede dar datos equivocados que terminaran por alarmarlo o por darle falsas expectativas.
Por otro lado, es mejor no pesarse durante los viajes, para evitar traumas que le impidan disfrutar de sus vacaciones.
Snacks saludables
Es importante saber qué planes se van a realizar y si es posible acceder a un restaurante o, sí, por el contrario, se deben preparar los pasabocas para el camino. Si esta última es la opción, contemple recetas saludables con ingredientes que le gusten y que usted sepa que no van a afectar su dieta.
También puede contemplar barras de cereales y productos por el estilo que no contengan azúcar. Las frutas son otros alimentos saludables que le pueden ayudar a controlar la ansiedad y puede optar por los insumos locales, con lo que podrá probar algo nuevo y mantener el estómago lleno.
Actividad física
Es importante mantenerse activo; sin importar el destino, busque siempre estar en movimiento. Realice planes que involucren caminar y si es posible involucre actividades deportivas. Ver el amanecer, si está en la playa, puede ser una buena excusa para caminar o trotar. De esta manera irá compensando la balanza entre los pecados gastronómicos que cometa y el control del peso corporal.
No evitar comer
Se tiende a pensar que dejar de comer puede ayudar a perder peso, pero no es así; por esta razón, durante el viaje, no deje de comer las cinco veces al día, cantidad recomendada por especialistas. De esta forma tendrá activo el metabolismo y evitará malestares estomacales.
Ensaladas, un gran aliado
Es cierto que hay recetas a las que nadie se puede negar, más si se visitan lugares donde uno de los puntos fuertes del turismo es el gastronómico. Para evitar remordimientos, pida una ensalada, lo que le permitirá experimentar saciedad y evitar tener antojos. Si no los resiste, sea moderado con las porciones y evite al máximo los fritos.
Evite condimentos
Hay lugares donde los condimentos son típicos, por lo que puede probarlos sin miedo; pero sí evite las salsas y los otros aditivos que puede conseguir en su ciudad de manera cotidiana. No tiene sentido consumir algo que normalmente se tiene a disposición en la casa o en el entorno.
Bebidas sanas
Consuma mucha agua durante el viaje, le ayudará a eliminar las toxinas y a mantenerse hidratado. Evite al máximo el alcohol y las bebidas azucaradas. No está mal probarlas, pero recuerde que los excesos siempre son malos para el organismo.