La Escuela Ergon, una institución que ofrece programas formativos centrados en los sectores laborales con mayor demanda en España, explica que el esmalte de uñas surgió en la antigua realeza egipcia, donde las mujeres se maquillaban las uñas con el objetivo de indicar cuál era el estatus social que ocupaba cada una.
“El color oscuro se asociaba a la clase alta y los tonos más claros eran propios de lo más pobres”, anota la institución.
Se dice que las manos son la principal carta de presentación. Si es cierto o no, queda a juicio de cada quien; la verdad es que hoy en día el maquillaje de las uñas está en boga y los centros de estética ofrecen cada día mayor variedad.
Entre las distintas técnicas que se emplean en la manicura, sin dejar de lado el sinnúmero de colores, decoraciones y accesorios que las componen, hay dos que están mandando la parada en la actualidad: las uñas acrílicas y las uñas de gel.
Las uñas acrílicas se llevan a cabo mezclando polvo acrílico (polímero) con líquido acrílico (monómero). “Esta técnica consiste en añadir unas extensiones a las uñas naturales para después decorarlas al gusto de cada uno”, reseña la Escuela Ergon.
Sobre sus resultados, reseña que son diversos. Las personas pueden obtener desde uñas largas o cortas hasta cuadradas, redondeadas o puntiagudas, con cualquier esmalte o técnica. Este tipo de uñas ha tenido gran acogida gracias a la apariencia que guardan con las uñas naturales y su dureza.
Entre tanto, las uñas de gel se destacan por su efecto natural. “Son bastante más flexibles y brillantes y menos duras que las acrílicas”, explica la institución española. Esta técnica consiste en aplicar un gel directamente sobre la uña y secarlo con la lámpara led; por lo general se necesitan entre dos y tres capas de gel, hasta que esta esté firme y resistente.
Beauty Nail Concept (BNC), un centro de estética enfocado en tratamientos de belleza faciales y corporales con sede en Barcelona (España), explica que los resultados que se obtienen entre acrílico y gel son similares.
Los dos alargan uñas y las endurecen, así como alargan y afinan los dedos y permiten realizar distintos diseños. BNC advierte que estas dos técnicas son difíciles de aplicar en casa, pues requieren el conocimiento de un experto y los materiales adecuados.
De acuerdo con Beauty Nail Concept, estos son los pros y los contras que tienen estas dos técnicas:
Uñas acrílicas
Entre los pros que tienen estas uñas destaca que son muy resistentes y duran varias semanas, dependiendo de su cuidado. Pueden ser aplicadas en uñas muy cortas, así que pueden convenir para las personas que se muerden las uñas. “En el caso de que se rompa una uña, el acrílico es fácil de limar en casa hasta que puedas volver a ir a tu esteticista”, añade BNC.
Sobre los contras que tiene esta técnica, el centro de estética explica que si no se cuidan de la forma adecuada, se pueden dañar, abriendo paso para una posible aparición de hongos y bacterias. Otro punto a considerar es que, en comparación con las demás técnicas, las uñas acrílicas lucen menos naturales que las uñas de gel.
Uñas de gel
La apariencia de las uñas de gel luce más natural que la de las uñas acrílicas y tiene un acabado más brillante. Se secan más rápido que las acrílicas y son consideradas una alternativa más ecológica y segura, pues su aplicación implica el uso de menos vapores que la de las uñas acrílicas.
En su contra, el centro reseña que las uñas de gel “no duran lo mismo que las uñas acrílicas, a pesar de que tienden a costar más dinero”. Además, no las recomiendan para las personas que tienen uñas mordidas, pues no se sujetan sobre una base pequeña.