Las venas varicosas se presentan cuando estas se retuercen y se agrandan. Información del instituto Mayo Clinic asegura que cualquier vena que esté cerca de la superficie de la piel puede volverse varicosa. Normalmente, es una afección que impacta más las piernas y esto se debe a que estar de pie y caminar aumenta la presión en las venas de la parte inferior del cuerpo.
Para muchas personas, las venas varicosas y las arañas vasculares, una variación leve y común de las várices, son simplemente un problema estético. Para otras, es posible que causen dolor y malestar. A veces, las venas varicosas ocasionan problemas más graves.
Las venas de las piernas tienen válvulas que ayudan a mantener la sangre fluyendo en una sola dirección hacia el corazón. Si las válvulas están débiles o dañadas, la sangre puede detenerse y acumularse en las venas, lo que hace que se hinchen, según información de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos.
El tratamiento puede incluir medidas de cuidado personal o procedimientos que el proveedor de atención médica hace para cerrarlas o retirarlas. Para aliviar los malestares en casa, es posible recurrir a algunos remedios que ayudan a aliviarlas.
Levantar los pies
Una de las opciones más prácticas para aliviar las molestias causadas por las várices es acostarse con las piernas rectas y los brazos a los lados. Luego, se levantan lentamente las piernas hacia el techo, manteniéndolas rectas. Lo recomendable es conservar la posición durante unos segundos y luego bajarlas lentamente.
Uno de los beneficios de la elevación de las piernas es que mejora la circulación sanguínea y ayuda a reducir la hinchazón y la aparición de várices. Lo aconsejable es realizar tres series de 10 repeticiones cada una, descansando 30 segundos entre cada serie, precisa información de la revista La Vida Lúcida.
Baños de inmersión
Este remedio se puede realizar todos los días. Además, puede ser de gran ayuda para los pies, gracias a que se sentirán descansados, relajados, frescos e incluso deshinchados. Estos baños se realizan en un balde o una tina con agua y sal marina. Se sumergen las piernas durante veinte minutos mientras se dan masajes suaves, de acuerdo con información de la revista Mejor con Salud.
Ejercicio regular
Realizar actividad física de manera regular fomenta una mejor circulación sanguínea en las piernas, lo que ayuda a impulsar la sangre que se ha acumulado en las venas. El portal Medical News Today indica que los ejercicios de bajo impacto incluyen: caminar, montar en bicicleta y hacer yoga.
Flexiones de tobillo
Estas flexiones ayudan a mejorar la circulación sanguínea en las piernas y a fortalecer los músculos de los tobillos. Para realizarlas, la persona se acuesta en el suelo en una colchoneta, con las piernas rectas y los brazos a los lados. Luego, se flexionan los tobillos hacia sí mismo y se mantiene la posición durante unos segundos. Posteriormente, se mueven los tobillos hacia afuera por unos segundos y se repite el ejercicio varias veces.
Manzanilla y caléndula
Este es un remedio herbal que ayuda a reducir la inflamación de la piel y a flexibilizarla. Para elaborarlo, se hierven dos litros de agua y se agrega un puñado de manzanilla y uno de caléndula. Se deja reposar y después se aplica sumergiendo los pies en una tina o balde. Estas hierbas además de sus beneficios para desinflamar ayudan a relajar brindando descanso en esta parte del cuerpo.
¿Cómo prevenir la aparición de várices?
Algunos de los consejos y medidas para prevenir esta afección son los siguientes:
- - Evitar sentarse o estar de pie quieto durante largos períodos.
- - Dormir con las piernas elevadas.
- - No usar tacones.
- - No levantar pesas con los pies.
- - No usar anticonceptivos hormonales.
- - No fumar.
- - Si el trabajo o la vida diaria son sedentarios, hay que flexionar piernas y tobillos frecuentemente.
- - La actividad física regular disminuye la presión en las venas y alivia las molestias.