La piel es el único órgano que está en contacto frecuente con el exterior y, por ello, es la encargada de proteger el cuerpo de agentes externos como el calor, el frío o, incluso, algunas bacterias.
Además, la piel posee cualidades insuperables en cuanto a impermeabilidad, autoreparación, autolubricación y eliminación de residuos, según explica la entidad especializada en salud, Sanitas.
Así mismo, este órgano puede señalar la aparición de enfermedades internas con cambios en su coloración, en su textura, o con la manifestación de protuberancias o manchas.
“La piel contribuye a la producción de vitamina D, vital para la salud de huesos y articulaciones. Controla la temperatura del cuerpo. Puede mostrar las emociones, es fuente de atracción social y sexual y denota el origen racial”, afirma Sanitas.
Actualmente, muchas personas consideran importante mantener una piel tersa, alejada de las impurezas, de las arrugas y las manchas, por lo que se han creado una variedad de productos con los que es posible mantener un cutis terso y juvenil.
Uno de los productos naturales que puede ayudar con este objetivo es el vinagre de manzana, pues, según la revista digital UnComo del medio especializado Mundodeportivo, “ayuda a equilibrar los niveles de PH de la piel y absorbe el exceso de aceite de la superficie”.
La miel, también es un componente hidratante, revitalizante, suavizante, antioxidante y nutritivo; ideal para todo tipo de piel. Además, este producto natural tan beneficioso para la piel puede utilizarse de diversas formas no solo para brindarle a la piel un aspecto saludable, sino para rejuvenecerla y ayudar a reducir las arrugas.
Incluso, el portal especializado Salud180 indicó cómo realizar una mascarilla a base de estos ingredientes (vinagre de manzana y miel) para evitar las arrugas prematuras y mantener una piel tersa y juvenil. Pare ello se necesita: una cucharadita de miel, una cucharada de vinagre de manzana y medio vaso de agua.
Preparación y uso:
1. Mezclar todos los ingredientes en un recipiente limpio.
2. Limpiar el rostro para que los nutrientes penetren correctamente.
3. Aplicar en el área dando ligeros masajes circulares.
4. Dejar actuar alrededor de 20 minutos.
5. Enjuagar y aplicar el humectante de preferencia.
Cabe resaltar que las arrugas son una parte natural del proceso de envejecimiento. A medida que la gente envejece, su piel se vuelve más fina, más seca y menos elástica. Además, se vuelve menos capaz de protegerse de los daños. Por esta razón, se producen más rápido las arrugas y las líneas en la piel. Entre sus factores de aceleramiento están:
- Las expresiones faciales: sonreír repetidamente, fruncir el ceño o entrecerrar los ojos puede conducir a la aparición de líneas finas y arrugas a una edad más temprana. Cuando una persona es joven, la piel vuelve a nacer, pero a medida que envejece, la piel pierde su flexibilidad.
- La exposición a la luz ultravioleta (UV): a través de baños de sol, cabinas de bronceado y algunos deportes al aire libre, aumenta la posibilidad de desarrollar arrugas a edad temprana. Esto se produce por la luz ultravioleta, la cual descompone las fibras de colágeno y elastina de la piel.
- El alcohol: beber mucho alcohol deshidrata la piel y, al estar seca, tiene más probabilidades de arrugarse.
- Fumar con regularidad: fumar acelera el proceso de envejecimiento de la piel, debido a la reducción del suministro de sangre a la piel.