La salud visual es necesaria para llevar una buena calidad de vida. Por eso es fundamental prestar atención a algunas condiciones médicas que podrían afectarla y que, en ocasiones, requieren un tratamiento adecuado.
Una de estas molestias es la presbicia, que se da cuando los ojos dejan de tener la capacidad para enfocar lo que está cerca, una habilidad que es clave para actividades cotidianas como leer y escribir. Se trata, sin embargo, de una condición que empieza a ser frecuente en los pacientes después de los 40 años y continúa agudizándose conforme avanza la edad.
“Es posible que te des cuenta de que tienes presbicia cuando comiences a sostener libros y periódicos a un brazo de distancia para poder leerlos. La presbicia puede confirmarse mediante un examen ocular básico. El trastorno puede corregirse con anteojos o lentes de contacto. También podrías considerar una cirugía”, indica la Clínica Mayo a través de su portal de información web.
Esa institución advierte que se trata de una afección de salud visual que tiene múltiples causas relacionadas con distintas partes del ojo humano. En esa medida, señala que el problema puede estar relacionado con la córnea y el cristalino, que se encargan de identificar la luz que reflejan los objetos.
El cristalino es un músculo y, como tal, tiene una gran flexibilidad. Se contrae y relaja dependiendo de lo que el ojo necesite enfocar. Pero con el envejecimiento es frecuente que se endurezca y pierda esa flexibilidad.
Es por eso que las personas que empiezan a presentar presbicia tienen la sensación de que no pueden enfocar los objetos que se encuentran a una distancia corta.
La Clínica Mayo cita algunos factores de riesgo que vale la pena tener en cuenta, pues pueden aumentar las probabilidades de que una persona desarrolle presbicia.
Tal vez la condición más común es la edad, precisamente porque algunas partes del ojo se desgastan con el paso del tiempo. No obstante, hay otros factores que pueden ser tenidos en cuenta, como algunos trastornos visuales.
Según la Clínica Mayo, es frecuente que la presbicia se presente en las personas con hipermetropía. De acuerdo con la Academia Americana de Oftalmología, se trata de una afección que genera dificultades en los ojos para enfocar lo que ven.
“Si un padre o madre es hipermétrope, hay mayor riesgo de que sus hijos también lo sean. Pero no es necesario que un padre o madre sea hipermétrope para que sus hijos sean hipermétropes”, indica la Academia Americana de Oftalmología.
La presbicia también puede estar relacionada con enfermedades que afectan otras partes y funciones del cuerpo como la diabetes, la esclerosis múltiple o algunas afecciones del corazón.
Así mismo, la Clínica Mayo indica que hay medicamentos que pueden causar presbicia, como algunos antidepresivos, antihistamínicos y diuréticos.
Los principales indicios de que tiene presbicia
No siempre es fácil determinar que una persona está presentando presbicia, pues hay múltiples trastornos oculares que pueden causar dificultades para ver correctamente. Sin embargo, la Clínica Mayo cita algunos síntomas que pueden resultar útiles para diagnosticar esta condición.
“La presbicia se manifiesta de forma gradual”, advierte esa institución. Así mismo, señala que la mayoría de la gente empezará a percibir algunos signos de esta condición después de cumplir los 40 años.
Entre otras manifestaciones cita la tendencia a alejar libros, periódicos, revistas o calendarios para poder ver las letras o los números mejor.
También advierte que puede presentarse una visión borrosa mientras se lee, pese a que el material de lectura está a una distancia normal. Así mismo, es frecuente presentar síntomas como cansancio en la vista y dolor de cabeza después de leer o intentar hacer trabajos que impliquen enfocar objetos pequeños.
“Es posible que notes que estos síntomas empeoran si estás cansado o te encuentras en un lugar con poca iluminación”, señala la Clínica Mayo.
Y concluye advirtiendo que hay ocasiones en las cuales es clave visitar al médico de urgencias. Por ejemplo, cuando se pierde la vista en un ojo de forma inusitada, cuando hay visión borrosa repentinamente, cuando hay una visión doble o cuando se ven destellos de luz o puntos negros.
Mientras tanto, la enciclopedia médica MedlinePlus, que recoge información de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, indica que hay varios exámenes que pueden ayudar a identificar si en realidad una persona sí está sufriendo de presbicia.
Entre otras cosas se deben practicar pruebas en la retina y exámenes de integridad muscular, de refracción, de agudeza visual o con lámpara de hendidura.
En cuanto a las opciones de tratamiento, lo cierto es que la ciencia médica no ha encontrado que la presbicia tenga una cura.
“Conforme empeora la presbicia, usted necesitará anteojos o lentes de contacto para leer. En algunos casos, adicionar lentes bifocales a los ya existentes puede ser la mejor solución. Los lentes de lectura o bifocales recetados se necesitarán amplificar conforme usted envejece y pierde más la habilidad para enfocar de cerca”, indica MedlinePlus.
Así mismo, indicó que en la actualidad se están investigando alternativas para reducir los síntomas que genera la presbicia, sobre todo para los adultos mayores.
Por ejemplo, indica que hay procedimientos quirúrgicos que podrían ayudar a recuperar la flexibilidad en el cristalino del ojo. También hay distintos tipos de gotas oftálmicas que podrían servir en un futuro para mejorar la presbicia.
Una de ellas hace que la pupila del ojo se vuelva más pequeña, con lo cual permite aumentar la precisión del enfoque porque mejora su profundidad. Este efecto es similar al que pueden tener algunas cámaras fotográficas.
“El otro tipo de gota funciona ablandando el lente natural, el cual se vuelve inflexible en la presbicia. Se desconocen los efectos a largo plazo de estas gotas”, advierte MedlinePlus.
Por ultimo, esa fuente médica advirtió que en la actualidad no hay registro de que haya medidas que se puedan tomar para prevenir la presbicia.