El envejecimiento cristalino es una de las principales causas de que la visión se torne borrosa y todas las personas que padecen esta afección presentan una incapacidad de enfocar correctamente las cosas que están a una cierta distancia.

Dos de los principales síntomas de la visión borrosa son la necesidad constante de iluminación para lograr ver mejor y la fatiga ocular, que se presenta cuando se realizan algunas labores y se evidencia enrojecimiento o sensación de arenilla en el ojo.

La Organización Mundial de la Salud insiste en la importancia de una alimentación balanceada para disminuir el riesgo de enfermedades no transmisibles. Una dieta balanceada también ayuda a evitar afecciones de salud visuales a causa de otras condiciones de salud como la diabetes, entre otras.

Mejor con Salud, sitio web especializado en salud y cuidado personal, explica que las frutas cítricas son importantes para la salud de los ojos. Su consumo frecuente puede ayudar a disminuir el riesgo de problemas visuales al ser adulto mayor.

“Esto se debe a su significativo aporte de vitamina C y betacarotenos, dos nutrientes de acción antioxidante que ayudan a proteger las células contra los efectos del estrés oxidativo. Dichos nutrientes optimizan el proceso de regeneración de los tejidos. Además, ayudan a reducir las agresiones causadas por el sol y las toxinas”, detalla el portal web.

De igual manera, es necesario destacar que hay una gran cantidad de hierbas que presentan un alto contenido de propiedades medicinales que son beneficiosas para ayudar a contrarrestar distintas afecciones de salud.

En este sentido, el portal El Español le recomienda consumir a las personas que sufran de visión borrosa una hierba en especial, el aciano, también conocida como azulejo.

Esta hierba, al prepararla en infusión, tiene una función principal, fortalece y conserva la vista, dado que, sus componentes fomentan y mejoran la circulación capilar del ojo, aliviando la vista y la irritación ocular.

Tipos de cataratas

  • Cataratas que afectan el centro del lente (catarata nuclear). Una catarata nuclear puede al principio provocar miopía alta o incluso una mejora temporal en la visión de lectura. Sin embargo, con el tiempo el lente se vuelve gradualmente más amarillo y opaca más la visión. A medida que la catarata avanza lentamente, el lente incluso puede adquirir un tinte marrón. El color amarillento o amarronado puede provocar dificultad para distinguir tonos de colores.
  • Cataratas que afectan la parte posterior del lente (cataratas subcapsulares posteriores). Una catarata subcapsular posterior comienza como una pequeña área opaca que normalmente se forma cerca de la parte posterior del lente, justo en el paso de la luz. Una catarata subcapsular posterior a menudo afecta la visión de lectura, reduce la visión con luz brillante y provoca resplandor o halos alrededor de las luces a la noche. Estos tipos de cataratas tienden a avanzar más rápido que los otros tipos.
  • Cataratas con las que se nace (cataratas congénitas). Algunas personas nacen con cataratas o estas se manifiestan durante la infancia. Estas cataratas pueden ser genéticas o estar relacionadas con una infección intrauterina o un traumatismo. Estas cataratas también pueden deberse a determinadas afecciones, como distrofia miotónica, galactosemia, neurofibromatosis tipo 2 o rubéola. Las cataratas congénitas no siempre afectan la visión, pero si lo hacen generalmente se extraen apenas se detectan.