Las vitaminas y minerales son nutrientes muy importantes para el buen funcionamiento del organismo y ayudan a prevenir enfermedades degenerativas. Por lo general, siempre se escucha hablar de las vitaminas C, D y E, pero una que no es tan conocida es la vitamina F, la cual ayuda a prevenir el envejecimiento prematuro.
De acuerdo con el portal MyProtein de España, la vitamina F a pesar de que tiene nombre de vitamina, realmente no lo es. Se trata de un conjunto de ácidos grasos poliinsaturados, que se dividen en omega-3 y en omega-6. El organismo no puede sintetizarla de manera natural, por lo que es fundamental incluirla en alimentos que contengan este tipo de ácidos grasos.
En consecuencia, con lo anterior, todos los ácidos grasos del grupo de los Omegas, son excelentes aliados para disminuir las inflamaciones celulares causadas por el envejecimiento ocasionado por el consumo de alimentos que son ricos en azúcares.
A su vez, también ayudan a mejorar el sistema cardiovascular y mantienen una barrera de protección que regenera la humedad en la piel, gracias a una muralla lipídica que contienen el agua que la epidermis necesita, impidiendo el acceso de agentes que pueden producir irritación o infecciones.
Además, uno de los beneficios más importantes de la vitamina F es que previene el envejecimiento prematuro, disminuye las manchas de la piel, tratar los problemas de acné y disminuye la inflación o las infecciones de la piel.
Alimentos ricos en vitamina F
Al tratarse de un conjunto de ácidos grasos, se pueden incorporar a la dieta los siguientes productos:
- Aceites vegetales, como los de oliva, soja, de lino, de maíz, de girasol o de nuez.
- Pescados azules como el salmón, las caballas, las sardinas o el atún. Frutos secos como nueces, almendras y cacahuetes.
- Semillas como la de girasol o de lino.
Cabe mencionar que una dieta saludable en vitamina F aporta beneficios para el organismo; sin embargo, otra vía para introducir esta vitamina es mediante la cosmética natural, utilizando productos que ayuden a restaurar la flexibilidad y el brillo de la piel. Por ejemplo, el aloe vera tiene altos niveles de vitamina F, por lo cual es ideal incluirlo en la rutina de la limpieza facial.
El aloe vera tiene propiedades antibacterianas que ayuda a tratar determinadas afecciones cutáneas. También tiene propiedades antiinflamatorias que alivian el dolor, la inflamación de la piel, evitan la resequedad y ayuda a los procesos de cicatrización.
Otras vitaminas para el cuidado de la piel
- Vitamina A: Está relacionada con el retraso de los signos del envejecimiento, gracias a su grupo de compuestos llamados retinoides, los cuales ayudan a regenerar la piel y, a su vez, estimulan la producción del colágeno que permite mantenerla joven y saludable.
Según Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica clínica, la educación y la investigación, esta vitamina tiene muchas propiedades que benefician al cuerpo humano. Por ejemplo, tiene antioxidantes, los cuales protegen a las células de los efectos de los radicales libres. Además, es usada con frecuencia en el campo de la belleza debido a que ayuda en los procesos de cicatrización e hiperpigmentación.
- Vitamina C: Contribuye a la reparación de los tejidos, fortalece el sistema inmunológico y es esencial para muchos de los procesos enzimáticos del cuerpo que mantienen sanas a las personas, además de ser un potente antioxidante. Por ejemplo, ayuda a sanar heridas, formar tejido cicatricial, y reparar y mantener el cartílago, los huesos y los dientes.
- Vitamina E: Según un estudio publicado en Indian Dermatology Online Journal, esta vitamina ayuda a la prevención de enfermedades dermatológicas, contribuye al proceso de cicatrización y previene el envejecimiento prematuro.