Una de las patologías que más ocasiona la muerte a nivel mundial es el cáncer, una afección que provoca el crecimiento descontrolado de células anormales en el cuerpo que también se denominan células malignas. De acuerdo con Medline Plus, sitio web de la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, el cáncer se presenta cuando el material genético de una célula cambia, lo cual provoca que las células crezcan fuera de control.

Como tal, el cáncer es ocasionado por cambios (mutaciones) en el ADN dentro de las células. Según la entidad en mención, el ADN que hay en una célula está dentro de un gran número de genes, cada uno de los cuales contiene un grupo de instrucciones que le indica a la célula qué funciones realizar, y cómo crecer y dividirse. “Los errores en las instrucciones pueden provocar que la célula detenga su función normal y se convierta en una célula cancerosa”.

De esta manera, es importante detectar a tiempo los síntomas que pueden desencadenar algún tipo de cáncer en el cuerpo. De hecho, la University of California San Francisco destaca que una de las señales que puede indicar cáncer hace referencia a la menstruación en mujeres. Específicamente, la institución académica indica que es normal que la mayoría de las mujeres tienen menstruaciones irregulares o cólicos ocasionalmente. Sin embargo, el dolor persistente o los cambios en el ciclo pueden ser un signo de cáncer del cuello uterino, del útero o cáncer ovárico.

Según el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos, el cáncer de cuello uterino se origina en las células del cuello del útero y también se conoce como cáncer de cérvix o cáncer cervicouterino. Antes de que este cáncer se forme, las células del cuello del útero sufren ciertos cambios conocidos como displasia y se convierten en células anormales en el tejido del cuello uterino, y con el tiempo, si las células anormales no se destruyen o se extraen, es posible que se vuelvan cancerosas, se multipliquen y se diseminen a partes más profundas del cuello uterino y a las áreas que lo rodean.

El cáncer de cuello uterino se origina en las células del cuello del útero y también se conoce como cáncer de cérvix o cáncer cervicouterino. | Foto: Copyright

El cuello uterino tiene dos partes principales:

  • El ectocérvix (también llamado exocérvix) es la parte más baja del cuello uterino que se observa durante un examen ginecológico. El ectocérvix está revestido de células delgadas y planas llamadas células escamosas.
Enfermedades del sistema reproductivo femenino.cáncer de útero y tumor maligno de endometrio como concepto médico uterino. | Foto: Getty Images

Tipos de cáncer de cuello uterino

De acuerdo con el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos, los cánceres de cuello uterino normalmente llevan el nombre del tipo de célula donde comenzó el cáncer. Estos son los dos tipos principales:

  • Carcinoma de células escamosas: de acuerdo con varias estadísticas, la mayoría de los cánceres de cuello uterino (hasta el 90 %) son carcinomas de células escamosas. Estos cánceres, que también se conocen como carcinomas epidermoides, se originan en las células del ectocérvix.
  • Adenocarcinoma: este tipo de cáncer también se conocen como adenocarcinomas cervicales, el cual se origina en las células glandulares del endocérvix. El adenocarcinoma de células claras, también llamado carcinoma de células claras o mesonefroma, es un tipo raro de adenocarcinoma de cuello uterino.
Ovarios, útero, trompas de falopio, ovario poliquístico, cáncer de ovarios, inflamación de ovarios, aparato reproductivo | Foto: Getty Images

Así las cosas, es importante mitigar malos hábitos como el consumo de tabaco y de alcohol, la alimentación poco saludable, evitar la radiación ultravioleta, la inactividad física, y minimizar la exposición ocupacional a las radiaciones ionizantes y la contaminación del aire, ya que son factores de riesgo de cáncer y de otras enfermedades no transmisibles.