El cabello es una de las partes del cuerpo que tanto mujeres como hombres buscan proteger a toda costa para evitar la caída del cabello o problemas capilares como la caspa. Una forma de cuidar las fibras del pelo es secándolo correctamente después de la ducha.
De acuerdo con la revista Mejor con Salud, la mejor opción es permitir que se seque al aire libre; sin embargo, muchas personas desean acelerar el proceso para salir de casa con un mejor aspecto o con algún peinado en particular, por lo que usan fuentes de calor que elimina el brillo y elasticidad del cabello.
Por lo anterior, la revista en mención da a conocer algunos trucos de secado natural que pueden implementarse con más regularidad sin afectar las hebras capilares:
Usar acondicionador y peine
Específicamente, la aplicación de acondicionador en el cabello no solo suaviza sus fibras, sino que también ayuda a repeler el agua debido a sus compuestos por siliconas especiales. Además, sus fórmulas hidratan y nutren, lo que hace que las hebras estén más manejables al momento de peinar.
Elegir una toalla adecuada
Uno de los elementos imprescindibles para secar el cabello de forma rápida es la toalla. Muchas personas afirman que las de microfibra son las mejores dado que absorben hasta dos veces más el agua. Aun así, las de algodón también cumplen la función y son suaves con el pelo. Un truco bastante útil que no maltrata el cabello es enrollar la toalla en forma de turbante para absorber mejor el agua.
Optar por una camiseta de algodón
Este es un truco bastante útil que se conoce como Air Plopping , el cual consiste en poner una camiseta de algodón sobre la cama, extender el pelo sobre esta y, luego, anudar las mangas sobre la frente para envolver todo el cabello. Una vez hecho esto, se debe dejar actuar de 10 a 20 minutos. “La idea es que la camiseta absorba la humedad y evite la formación de frizz, sobre todo en aquellos cabellos rizados y rebeldes. Se dice que es útil para mantener la forma natural del rizo”, indica Mejor con Salud.
Elegir el cepillo correcto
Como tal, los cepillos son el complemento ideal para retirar los excesos de humedad en el cabello. Además, cumplen una función importante cuando se realiza un secado con herramientas de calor. Así las cosas, para un secado al aire libre se recomiendan aquellos de fibras naturales; sin embargo, si es con secador, es mejor optar por los redondos con ventilación en cerámica.
Usar secador, pero con reglas
El uso de secador es una de las formas más rápidas para secar el cabello y aunque es una fuente de calor que suele maltratar el cabello, existen algunas reglas para utilizarlo. Lo primero es dejar secar el cabello al natural en un 30 o 40 % antes de utilizar este elemento. Enseguida, es importante aplicar un protector de calor tanto para contrarrestar el frizz como para minimizar los daños causados por las altas temperaturas.
“El secado debe comenzar por las raíces y, poco a poco, se va desplazando hacia el largo de las hebras. Procura hacerlo en un espacio ventilado, por fuera del área del baño, ya que la humedad del ambiente puede causar encrespamiento”, indica la revista en mención.
Usar una toalla caliente
No es conveniente usar secador con frecuencia, por lo que un truco ideal para acelerar su secado es absorber la humedad con una toalla caliente. El tip consiste en calentarla con la ayuda de la plancha, y luego envolver el cabello cuando aún esté caliente. “Se dice que el calor hace que las cutículas del pelo se abran, lo que acelera el secado”.