Preservar la calidad de los alimentos y así poder alargar su tiempo de vigencia, es uno de los elementos claves a la hora de cuidar y mantener una ingesta adecuada de estos, esto con el objetivo de que puedan mantener su sabor y sus propiedades, para la absorción por parte del organismo.
Dentro de este objetivo, la nevera juega un papel clave, ya que permite mantener los alimentos a una temperatura constante, y que a su vez mantenga la calidad de los mismos, evitando que estos puedan dañarse, oxidarse o encontrarse en mal estado.
Sin embargo, no todo se puede guardar en este electrodoméstico, por el contrario, existen distintos alimentos respecto a los cuales se recomienda mantenerlos a temperatura ambiente, y mantenerlos alejados de algunos productos que usualmente están presentes en la nevera.
Es por esto, que se hace de gran relevancia poder revisar de cuáles se trata, y que de esta forma se evite esta práctica que puede ser dañina no solo para estos alimentos, sino también para el organismo una vez que se consuman.
El portal micasa resalta que el primer elemento que no se debe guardar en la nevera, es el pan, este alimento tan común, posee moléculas de almidón, las cuales al encontrarse en temperaturas muy bajas hacen que el pan acabe pudriéndose más rápido que si se mantuviera a temperatura ambiente, para así evitar que este se endurezca, y a su vez acabe siendo negativo para el cuerpo humano a través de su consumo.
En segundo lugar, se encuentran las cebollas, un alimento muy frecuente dentro de las neveras, pero que, en realidad, se encuentran en mejor estado en un lugar seco y que presente buena ventilación, esto a causa de los fuertes olores que puede producir esta verdura, para de esta manera poder evitar que estos sabores u olores se propaguen por el resto de elementos presentes en la nevera. En caso de que solo se use la mitad, se recomienda congelar el resto.
Un caso similar sucede con los ajos, otro alimento con un sabor y olor muy fuerte también, por lo que se recomienda mantenerlos en un sitio seco y ventilado.
En cuarto punto, se resaltan los aguacates, estos poseen un tiempo de maduración muy concreto, y que pasa con gran rapidez hasta llegar a ponerse en mal estado, sin embargo, ponerlos bajo refrigeración, evita que estos puedan madurar adecuadamente para su consumo, por lo que es mejor mantenerlos fuera de la nevera, al menos hasta poder abrirlos, una vez se haga esto, si se recomienda ponerlos en el refrigerador.
Misma recomendación es tomada para los tomates, este alimento al encontrarse en condiciones de temperatura excesiva, puede acabar perdiendo parte de su sabor, por lo que es recomendable que se mantengan fuera, siempre y cuando no sea a la luz del sol, ya que esto los puede acabar dañando con rapidez.
De la misma forma se mencionan la miel, porque en la nevera se puede acabar solidificando. Los melones y la sandía, puesto que estas pueden permanecer en un frutero, al menos hasta ser abiertas, puesto que ocupan una gran cantidad de espacio en la nevera, y el café, por el hecho de que este puede absorber de manera excesiva los olores y sabores de otros alimentos.
Finalmente, para cerrar la lista, hace aparición uno de los más comunes en la nevera de muchas personas, y que no requieren esta refrigeración, como lo son los huevos, estos pueden estar en temperatura ambiente, lo que brindará grandes beneficios a la hora de cocinarlos, siempre y cuando se respete su tiempo de caducidad, sin embargo, debe quedar claro que si hace mucho calor, si es recomendable refrigerarlos.