Una de las partes más importantes que componen el sistema respiratorio y que son vitales para la salud son los pulmones, que son un par de órganos esponjosos de color gris rosáceo que se encuentran en el pecho y que se encargan de inhalar el aire que ingresa a los pulmones y el oxígeno de ese aire pasa a la sangre.

De acuerdo con el portal web Roche Pacientes, los pulmones, derecho e izquierdo, no son iguales. Por una parte, el pulmón derecho es de mayor tamaño que el izquierdo (debido al espacio que ocupa el corazón). Asimismo, los pulmones se dividen en lóbulos, el derecho en tres: lóbulo superior, medio e inferior y el izquierdo en dos: superior e inferior.

Sin embargo, estos dos órganos suelen ser muy susceptibles a enfermedades, por ejemplo, puede aparecer el cáncer de pulmón con síntomas iniciales que muchas veces pasan desapercibidos o se confunden con otras patologías leves.

Por lo anterior, la revista Mejor con Salud da a conocer las primeras señales que pueden alertar que una persona puede tener cáncer de pulmón:

Respiración forzada

Cuando se tiene dificultad para respirar, puede que no siempre sea un síntoma de una enfermedad grave, pero en caso de que esto se convierta en algo crónico puede ser una señal de alerta de quienes están desarrollando cáncer de pulmón.

De hecho, es importante consultar a un médico cuando el organismo se queda sin aliento al hacer actividades cotidianas o sentir que se debe hacer más esfuerzo para poder respirar.

La falta de repieración se puede presentar por una emergencia o por el padecimiento de algunas enfermedades. | Foto: Copyright Dazeley/Getty Images

Silbido en el pecho

Normalmente, este síntoma es común en pacientes que tienen afecciones respiratorias como el asma y los resfriados. No obstante, cuando se dan de forma repentina y sin razón aparente, pueden indicar que algo raro está pasando en los conductos respiratorios.

Fatiga

Tanto la fatiga física como mental suele ser uno de los síntomas más comunes en personas con cáncer, incluso, está muy relacionado con el sistema respiratorio debido a que las vías respiratorias, puesto que se estrechan por la formación de tumores o porque el líquido se queda retenido en los tejidos del pecho y dificulta la oxigenación de las células.

Tos persistente

Un artículo publicado en el hospital Caritas Medical Centre, explicó que la tos es una reacción inmunitaria ante el ataque de algunos virus y bacterias que proliferan en el sistema respiratorio, pero puede desaparecer en pocas semanas. Sin embargo, cuando se produce de forma crónica y permanente, es probable que tenga que ver con la presencia de células cancerosas. La revista en mención aconseja acudir al médico cuando se presenten las siguientes señales:

  • La tos es demasiado recurrente e incontrolable.
  • Al toser se producen sangrados.
  • La tos contiene demasiadas flemas.
  • Viene acompañada de ronquera
La tos es una reacción inmunitaria ante el ataque de algunos virus y bacterias que proliferan en el sistema respiratorio, pero puede desaparecer en pocas semanas. | Foto: Getty Images

Dolor en el pecho

La presión o dolor en el pecho suele incrementarse al realizar algún tipo de esfuerzo físico, pero cuando se extiende hacia los hombros y la zona lumbar, se debe prestar mayor atención porque se podrían estar desarrollando células cancerígenas en los pulmones.

Dolor en las manos y los dedos

Una de las primeras señales de cáncer es el dolor u hormigueo en las manos y los dedos. Respecto al cáncer de pulmón, algunos no encuentran una relación entre estas dolencias y las anormalidades del sistema respiratorio, ya que son áreas que están alejadas entre sí. No obstante, la American Cancer Asociety señala que el cáncer de pulmón puede propagarse a otras partes del cuerpo, alterando el sistema nervioso.

Una de las primeras señales de cáncer es el dolor u hormigueo en las manos y los dedos. | Foto: Getty Images

“Algunas veces aparece como señal de alerta de tumores en los conductos respiratorios, dado que su presencia dificulta la circulación y oxigenación. Por ello, las palmas de las manos con piel engrosada y blancuzca deben ser evaluadas por el médico”, indica Mejor con Salud.