Cada una de las plantas que se han documentado tienen propiedades y características muy distintas unas de otras. Una buena parte de ellas se consideran medicinales lo que les da más prestigio en el mundo de la ciencia para que se rotulen bajo el término de “curativas”.
Tanto la medicina científica como la alternativa cada vez más avanzan para sacarle el máximo provecho a los alimentos y a las plantas con el fin de aportar soluciones a la humanidad en cuanto a mejorar la calidad de vida de millones de personas en el presente y el futuro.
Uno de los mayores temores de las personas es el relacionado con la vejez. La última etapa de la vida es considerada como la más plena, tranquila y serena por muchos, sin embargo también se describe como precaria, triste y lamentable por otros, en especial por el tema de la salud, debido a que no muchos gozan de un buen estado corporal, ni mental, pasados los 60 años.
Conociendo esto, los expertos han encontrado una planta japonesa que aporta a llevar mejor la última etapa de la vida. Este recurso ha sido muy reconocido por las propiedades que tiene tanto medicinales como nutricionales, la ashitaba.
¿Qué beneficios tiene la ashitaba en el cuerpo?
Esta planta, sumamente valorada en la medicina tradicional japonesa, se ha empleado durante varios siglos como un componente ideal para el mantenimiento del hígado y los riñones, órganos muy importantes para el cuerpo que cumplen con funciones específicas.
Se considera que la ashitaba ayuda notablemente a la desintoxicación del cuerpo, a regular y mejorar las funciones del hígado y de los riñones y además fortalece el sistema inmune. También se utiliza para mejorar la presión arterial y la circulación, aliviar la fatiga y aportar a la salud digestiva.
Asimismo, la ashitaba es una gran aliada al momento de reducir lo niveles de colesterol y prevenir daños en el sistema cardiovascular. En el cuidado de la piel también es muy solicitada ya que es un estimulante para que se dé una cicatrización más rápida.
Esta planta contiene unos compuestos bioactivos muy puntuales además de comprobarse que contiene antioxidantes y fitoquímicos de los cuales se presumen que tienen efectos positivos para la salud en los seres humanos cuyos componentes pueden ayudar a combatir el estrés, disminuir las inflamaciones y ser agentes protectores contra varias enfermedades crónicas.
La planta que retrasa el envejecimiento
Con base en un estudio publicado en la revista médica Nature Communications, se concibe a la ashitaba como una planta la cual puede retrasar algunos procesos característicos del envejecimiento.
El biólogo molecular, Didac Carmona-Gutiérrez, junto con su equipo de investigadores de la Universidad de Graz, emprendieron una búsqueda para encontrar un compuesto natural que pudiera retrasar el envejecimiento, y con unos análisis desarrollados descubrieron que el compuesto 4,4′-dimetoxicalcona (DMC) era eficaz para combatir la vejez. Este compuesto está presente en la ashitaba.
Otro de los beneficios de la ashitaba, además de retrasar la vejez física, es la capacidad que tiene para disminuir el ácido en exceso del estómago, convirtiendo a la ashitaba en una medicina natural para las personas que padecen de esta molestia, además que aporta a presentar una digestión más saludable.
A pesar de que existen varios estudios científicos que poco a poco van descifrando más datos sobre la ashitaba, es recomendable que se consulte con el médico de preferencia si el consumo de esta planta es beneficiosa para la persona, ya que la ciencia admite que hay mucho por investigar y llegar a conclusiones sólidas para que esta planta sea considerada como un componente natural seguro para los problemas de salud que dice tratar y resolver.