El aceite de oliva se usa desde hace cientos de años y es recomendado por los especialistas debido a que está compuesto por ácidos grasos monoinsaturados, los cuales son considerados una grasa dietética saludable.
Según una publicación de la Fundación Española del Corazón, gracias a su alto contenido de estos ácidos grasos, el aceite de oliva ayuda a elevar los niveles de colesterol HDL (bueno), disminuye el malo, controla la hipertensión, reduce la aparición de trombosis y previene la aparición de diabetes.
Los expertos recomiendan utilizar este aceite en lugar de otros alimentos grasos como la mantequilla y la margarina en barra. También indican que no se puede hacer que los alimentos poco saludables sean más saludables solo con añadirles este producto, explica un informe del instituto de investigaciones Mayo Clinic. Su consumo debe hacer parte de una dieta equilibrada y la práctica regular de ejercicio.
Según la Fundación Española del Corazón, los estudios científicos muestran que el aceite de oliva extra virgen protege contra la inflamación, el estrés oxidativo y el riesgo cardiovascular provocados por el envejecimiento.
Su consumo regula, además, ayudaría a evitar que se desarrolle arteriosclerosis, la cual surge debido a la acumulación de placas de grasa en las paredes de las arterias, las cuales se registran por los elevados niveles de colesterol. Cuando esto se presenta, estos conductos se vuelven rígidos y gruesos, lo que dificulta el paso normal de la sangre y el oxígeno, impactando la salud del corazón.
Dado que es un alimento saludable, otra de sus bondades es que contribuye en la pérdida de peso. De acuerdo con un estudio publicado por la revista American Journal of Nutrition, aderezar las ensaladas u otras comidas con este aceite aumenta el flujo de sangre al cerebro, en específico a áreas asociadas a la sensación de satisfacción, por lo que ayuda a reducir el apetito, según el portal de bienestar Salud 180, de México.
¿Pero cuántas veces se puede reutilizar el aceite de oliva?
Una de las malas prácticas que se conocen sobre el mal uso del aceite es verterlo en el sifón. Por esto, la Empresa de Acueducto y Alcantarillado de Bogotá recomienda no hacer esto, porque un litro de aceite puede contaminar hasta 40.000 litros de agua y provoca taponamientos en las redes.
“Tú puedes evitar que el agua y el aceite se encuentren en el sifón, así impedimos emergencias por taponamientos en las redes y cuidamos nuestros ríos y humedales. Cada uno por su lado”, precisa en sus redes sociales oficiales.
En este sentido, la Federación Nacional de Cultivadores de Palma de Aceite (FedePalma) menciona en una de sus publicaciones que reutilizar el aceite incita al incremento de oxidación, provocando la formación de radicales libres que dañan las células del cuerpo y guardan relación con el envejecimiento prematuro. Incluso dice que puede causar insuficiencias hepáticas.
No obstante, Gastrolab Web precisa que según el tipo de aceite que se use, así mismo, se podrá reutilizar. En el caso del aceite de oliva, argumenta que se puede usar hasta 5 veces, siempre y cuando se limpie (se filtre) y no se hayan hecho frituras profundas, sin desestimar que reutilizarlo minimiza sus nutrientes y aumenta los riesgos para la salud.