De acuerdo con la definición del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos (NIH, por sus siglas en inglés), el colesterol es una sustancia cerosa que el cuerpo necesita para funcionar correctamente y gozar de buena salud. Sin embargo, es necesario que corresponda a cantidades adecuadas.

En tal virtud, el riesgo está en que los niveles poco saludables de colesterol pueden derivar en múltiples problemas de salud. Según explica la Fundación Española del Corazón, el colesterol se eleva si el organismo produce demasiado de esta sustancia o si el individuo lleva una dieta rica en grasas saturadas.

“Tener niveles elevados de colesterol total, triglicéridos y/o el colesterol LDL (de baja densidad o ‘malo’), incrementa el riesgo de padecer un ataque cardiaco. El colesterol se deposita en la pared de las arterias produciendo un estrechamiento de las mismas”, puntualiza la Fundación.

Por su parte, el colesterol HDL (de alta densidad o “bueno”) protege de la enfermedad de arterias coronarias. En esa línea, es conveniente monitorear los niveles de colesterol y mantenerlos dentro de un margen saludable.

Recomendaciones básicas

Con el objetivo de mantener unos niveles adecuados de colesterol en la sangre, la Fundación Española del Corazón comparte los siguientes consejos:

Los altos niveles de colesterol pueden inducir a enfermedades cardíacas. | Foto: Getty Images
  • Acudir a un profesional de la salud para evaluar el caso y establecer el tratamiento más adecuado.
  • Comer al menos cinco porciones de fruta y/o vegetales al día.
  • Preparar comidas con bajo contenido de grasa saturada. Una posibilidad es usar aceite de oliva en lugar de otros productos.
  • Consumir pescado al menos dos veces a la semana.
  • Tomar derivados lácteos con bajo contenido en grasa.

Desayuno para reducir el colesterol

La alimentación configura un campo a tener en cuenta al momento de regular los niveles de colesterol en la sangre. En ese sentido, una dieta saludable representa una herramienta bastante útil para mejorar la salud en general.

Según reseña el portal especializado Salud 180, la avena es un alimento común cuando de cuidar los niveles de colesterol se trata. Esto se debe a su alto contenido de fibra soluble, que ayuda a reducir el colesterol malo.

Mayo Clinic, entidad sin ánimo de lucro dedicada a la práctica médica, anota que la ingesta de 5 a 10 gramos de fibra soluble al día contribuyen a bajar los niveles de colesterol malo. Por ejemplo, una porción de salvado de avena en el desayuno proporciona al organismo de 3 a 4 gramos de este nutriente.

Licuado de avena para reducir el colesterol

Una de las formas de controlar los niveles de colesterol es con el consumo de avena. Según el medio especializado GastroLab, este alimento aporta antioxidantes y beta-glucanos, los cuales pueden ayudar a combatir la oxidación celular, regular la presión arterial y combatir la inflamación.

Una de las ventajas es que la avena puede ser consumida con diferentes alimentos, lo que a su vez puede aumentar los beneficios para el organismo. | Foto: Vladislav Nosick ©

Lo anterior significa que reduce los niveles de LDL (lipoproteínas de baja densidad) y triglicéridos. Además, contribuye a disminuir la placa que se forma en las arterias. Para aprovechar las propiedades anteriores, es posible realizar un licuado a base de avena que ayuda con este objetivo.

Los ingredientes necesarios son: tres guayabas, tres cucharadas de avena, una taza de leche vegetal y miel (opcional).

Preparación:

1. Lavar las guayabas y ponerlas en trozos en la licuadora.

2. Agregar las hojuelas de avena junto con la leche vegetal, por ejemplo, la de almendras.

3. Procesar hasta obtener un batido uniforme.

4. Endulzar con un poco de miel si es necesario.

Otra forma de preparar la avena es con los siguientes ingredientes: media taza de hojuelas de avena, 500 ml de agua y una rama de canela.

La canela es una especia compuesta de antioxidantes. | Foto: Getty Images

Preparación:

1. Servir las hojuelas de avena en un recipiente.

2. Añadir el agua y la rama de canela. Luego, mezclar, tapar y dejar en un lugar fresco reposando durante toda la noche.

3. Colar la mezcla y de esa manera estará lista para consumirse.

4. Se recomienda tomarla sin ningún tipo de endulzante.

5. Se aconseja tomar un vaso de agua de avena en ayunas. Se puede consumir a diario por al menos una semana y luego beber el agua de forma regular.