El melanoma es un cáncer que se origina en los melanocitos y se le conoce también como melanoma maligno y melanoma cutáneo. De acuerdo con American Cancer Society, la mayoría de las células del melanoma continúan produciendo melanina, de modo que los tumores tipo melanoma usualmente son de color café o negro. Sin embargo, estos no producen melanina y pueden lucir de color rosado, pálido o incluso blanco.
Específicamente, los melanomas se pueden desarrollar en cualquier parte de la piel, pero son más frecuentes en el tronco (pecho y espalda) de los hombres y en las piernas de las mujeres. Del mismo modo, el cuello y el rostro son otros sitios comunes.
Así las cosas, una piel con pigmentación oscura puede disminuir el riesgo de melanoma en los lugares más comunes, aunque cualquier persona puede también desarrollar este tipo de cáncer en las palmas de las manos, las plantas de los pies o debajo de las uñas. Frente a esto, la señal más importante para el melanoma es algún lunar nuevo en la piel o uno existente que haya cambiado en tamaño, forma o color.
Otra señal importante es algún lunar que luzca distinto a los otros en su piel, lo que se conoce como el signo del patito feo. Para identificarlos, se debe tener en cuenta las siguientes características:
- A de Asimetría: la mitad del lunar o marca de nacimiento no corresponde a la otra mitad.
- B de Borde: los bordes son irregulares, desiguales, dentados o poco definidos.
- C de Color: el color no es uniforme y pudiera incluir sombras diferentes de color marrón o negras, o algunas veces con manchas rosadas, rojas, azules o blancas.
- D de Diámetro: el lunar mide más de 6 milímetros de ancho (alrededor de ¼ de pulgada o aproximadamente del tamaño del borrador de un lápiz), aunque los melanomas algunas veces pueden ser más pequeños.
- E de Evolución: el tamaño, la forma o el color del lunar están cambiando.
Para mitigar esta afección, es fundamental llevar una dieta balanceada rica en vitaminas y minerales. De hecho, el consumo de nutrientes como la vitamina D ayuda a prevenir el melanoma en la piel, pues es conocida como la “vitamina del sol”, la cual cumple un rol fundamental para la salud.
De acuerdo con el portal web El Clarín, el 80% de este nutriente se incorpora en el cuerpo a través de la exposición solar, pero muchas personas, en especial a partir de los 50 años, requieren suplementarla mediante determinados alimentos o incluso con medicación oral.
Este nutriente ha sido analizado por varios científicos de todo el mundo, quienes analizan el vínculo entre un déficit de vitamina D y determinados tipos de cáncer, como el de mama, próstata y colon. Como resultado de estos experimentados, también se comprobó que los niveles adecuados de este nutriente en el organismo reducen el riesgo de padecer melanoma, el más peligroso cáncer de piel.
Una de las investigaciones más recientes sobre la relación entre la vitamina D y el cáncer, que fue realizada por el Centro Alemán de Investigación Oncológica, concluyó que los niveles necesarios de esta vitamina aumentan de manera significativa las posibilidades de sobrevivir a varios tipos de cáncer.
“Es posible que la vitamina D no proteja contra esta enfermedad, pero sí reduce la mortalidad. Estadísticamente, la probabilidad de morir por esa causa disminuye en un 12%”, afirmó el epidemiólogo del cáncer Ben Schöttker, el jefe de ese equipo de investigación.
Ahora bien, muchos estudios no han sido concluyentes con respecto al cáncer de piel, y en particular al melanoma. Sin embargo, una reciente revisión que se llevó a cabo por un grupo de investigadores de la Universidad de Finlandia Oriental detectó que las personas que consumen habitualmente suplemento de vitamina D presentan una menor incidencia de cáncer de piel, incluido el temido melanoma, un tumor con un potencial devastador si no es extirpado en estadios iniciales, según explicó Cuerpo Mente.
Cabe mencionar que a esta investigación se le suman otras que aportaron evidencias sobre la relación entre niveles adecuados de vitamina D y su beneficio en el melanoma, y asocian a esta vitamina con la presencia de un melanoma menos agresivo.