A medida que pasan los años, el cuerpo tiende a reflejar algunos cambios en la salud debido a distintos factores que no se tuvieron en cuenta desde temprana edad. De hecho, la alimentación después de los 60 años puede ser un poco diferente, pues los adultos mayores requieren menos calorías, pero más vitaminas y minerales.
La revista Mejor con Salud explica también del metabolismo va disminuyendo poco a poco, cada año; algunas personas tienen un menor gasto calórico, ya que se hacen más sedentarias con los años; se produce la pérdida de masa muscular (sarcopenia) y tiende a disminuir la densidad ósea; y después de la menopausia, las mujeres pueden desarrollar depósitos de grasa en la cintura, lo cual puede provocar obesidad central.
De esta manera, la alimentación después de los 60 debe cambiar un poco para prevenir enfermedades o evitar complicaciones, aunque se haya mantenido una dieta saludable en la vida adulta y la persona se encuentre en un peso ideal. A continuación, la revista en mención lista diez alimentos indispensables que se deben incluir a su dieta los adultos mayores:
Carnes magras
Los expertos aconsejan más consumo de aves y pescados que carnes rojas. Aunque las carnes rojas no suponen necesariamente un riesgo, hay que hacerlo de manera moderada y a su vez, evitar los procesados, que contienen otras sustancias necesarias para su conservación, pero que pueden ser nocivas.
Huevos y lácteos
Otras buenas fuentes de proteína animal son los huevos y lácteos en sus diversas formas. Asimismo, el yogur es un alimento que contiene probióticos. Sin embargo, no hay que excederse con los quesos, ya que la mayoría son altos en sal y los madurados contienen más grasas.
Granos
Entre las proteínas de origen vegetal que más se recomiendan consumir está la quinua, garbanzos, habas, lentejas, frijoles, así como la soja y sus derivados, incluyendo el tofu. Sin embargo, quienes sufren de gases intestinales, deben ser moderados con algunos granos.
Grasas
Como tal, el cuerpo requiere de grasas para realizar diversas funciones, como la absorción de vitaminas. De hecho, hay tres tipos de grasas: saturadas, monoinsaturadas y poliinsaturadas, pero las dos últimas son las más saludables.
Aceite de oliva
El consumo de aceite de oliva, según los expertos, están relacionados con diversos beneficios para la salud, lo que incluye desde el control de peso hasta la prevención de enfermedades del corazón y hasta el alzhéimer.
Frutas
Las frutas son una buena fuente de fibra y al ser rica en otros nutrientes, tales como vitamina C (sobre todo las cítricas), vitaminas B1, ácido fólico y potasio, favorecen distintas partes del cuerpo que son vitales.
Cereales
Entre los cereales con mayor contenido de fibra se encuentran cebada, avena, centeno, trigo o arroz integral, espelta, alforfón, mijo y amaranto, los cuales son ideales para las personas mayores de 60 años.
Alimentos que contienen hierro
Al no consumir suficiente este mineral, se puede presentar afecciones como la anemia ferropénica. Es por ello que los expertos en salud aconsejan consumir las carnes rojas, huevos y pescados, alimento que contienen hierro. A estos alimentos se suma el cacao, espinaca, acelga, berza, col china, sésamo, anacardo y frambuesas.
Fuentes de potasio
El potasio es un mineral esencial para el organismo, el cual se relaciona con la fuerza muscular, la presión arterial y el funcionamiento renal. Entre los alimentos que aportan más potasio se destacan plátanos, patatas y acelga, además de la col y la espinaca.
Alimentos que contienen magnesio
Otro nutriente importante para los adultos es el magnesio, el cual ayuda en el funcionamiento muscular y nervioso, así como la presión sanguínea. Según Mejor con Salud, los alimentos que contienen magnesio y que se deben incluir en la alimentación después de los 60 son las almendras, los dátiles y las pipas de girasol, así como espinacas, frijoles negros, plátanos y aves.