Para hablar de este tipo de afecciones es importante conocer en qué consisten, entender los cambios físicos y biológicos que llegan con el envejecimiento, así como también, cómo una bebida cotidiana puede ayudar a tener una mejor vejez.

Como primera medida, Mayo Clinic señala que a nivel biológico, el envejecimiento es el resultado del impacto de la acumulación de una amplia variedad de daños moleculares y celulares a lo largo del tiempo. Esto conduce a una disminución gradual de la capacidad física y mental, un riesgo creciente de enfermedad y, en última instancia, la muerte. Estos cambios no son lineales ni coherentes, y solo se asocian vagamente a la edad de una persona en años. La diversidad que se observa en la vejez no es aleatoria.

La pérdida de memoria ocurre principalmente por la vejez, aunque hay otros aspectos que pueden afectarla. | Foto: COPYRIGHT DAZELEY NOT ASSIGNED

En este sentido, más allá de los cambios biológicos, el envejecimiento suele ir asociado a otras transiciones vitales, como la jubilación, el traslado a una vivienda más adecuada y el fallecimiento de amigos y compañeros.

Entre las afecciones más comunes en la tercera edad se encuentran la pérdida de audición, las cataratas y los errores de refracción, el dolor de espalda y cuello y la artrosis, la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, la diabetes, la depresión y la demencia.

La vejez también se caracteriza por la aparición de varios estados de salud complejos y suelen ser consecuencia de múltiples factores subyacentes e incluyen fragilidad, incontinencia urinaria, caídas, delirio y úlceras por presión.

Por su parte, la pérdida de memoria normal relacionada con la edad no causa trastornos significativos en la vida cotidiana. Por ejemplo, a veces olvida el nombre de una persona, pero lo recuerda más tarde. Puede que a veces pierda las gafas. O quizá necesite hacer listas con más frecuencia que antes para recordar citas o tareas.

Estos cambios en la memoria suelen ser manejables y no afectan a su capacidad para trabajar, vivir de forma independiente o mantener una vida social.

La entidad mencionada destaca que “la palabra “demencia” es un término genérico utilizado para describir un conjunto de síntomas que incluyen alteraciones de la memoria, el razonamiento, el juicio, el lenguaje y otras habilidades del pensamiento. La demencia suele empezar gradualmente, empeorar con el tiempo y mermar las capacidades de la persona en el trabajo, las interacciones sociales y las relaciones”.

La pérdida de memoria se da producto de la vejez. | Foto: Copyright Dazeley

A menudo, la pérdida de memoria que altera su vida es uno de los primeros o más reconocibles signos de demencia. Otros signos tempranos pueden ser:

  • Hacer las mismas preguntas repetidamente
  • Olvidar palabras comunes al hablar
  • Confundir palabras, por ejemplo, decir “cama” en lugar de “mesa”.
  • Colocar objetos en lugares inadecuados, como la cartera en un cajón de la cocina.
  • Perderse mientras camina o conduce por una zona conocida.
  • Cambios de humor o comportamiento sin motivo aparente.

El proceso de la enfermedad de cada una de estas afecciones es diferente. La pérdida de memoria no siempre es el primer signo, y el tipo de problemas de memoria varía.

En todo este panorama de los daños y afecciones que vienen con los años existe una bebida mágica que ayuda a prevenir estos daños. Se trata de del café.

La cafeína es el compuesto principal de los granos de café. | Foto: Getty Images

Aunque como es sabido, no existe cura para el Alzheimer una de las principales enfermedades neurodegenerativas. Sin embargo, existen estudios que demuestran que consumidores de esta bebida podrían tener entre 60 y 65 % menos de posibilidades de desarrollar Alzheimer y tener problemas de memoria.

Además, según un estudio liderado por el Instituto Imdea Alimentación determinó que el harmol, un compuesto de la familia de las betacarbolinas que está presente en el café, mejora la función del músculo esquelético y parámetros metabólicos asociados con la calidad de vida durante el envejecimiento.