El arroz es uno de los alimentos más populares y consumidos en el mundo, convirtiéndose en el sustento básico de millones de personas. Es es producto que ofrece una serie de propiedades y beneficios para el organismo, pero la recomendación de los expertos es no exceder su ingesta.

El portal Cuerpo Mente destaca que este alimento aporta energía gracias a su riqueza en carbohidratos, siendo el almidón el más abundante y que tiene la ventaja de absorberse con lentitud, con lo que evita que se produzcan picos de azúcar en la sangre.

“Esta lentitud se acentúa en el arroz integral gracias a su mayor riqueza en fibra, que reduce su índice glucémico. Por ello es es un producto adecuado para diabéticos”.

El portal Cocina Fácil, de México, cita datos del Sistema Mexicano de Alimentos Equivalentes, según los cuales una taza de arroz blanco aporta aproximadamente 240 calorías; 4,4 gramos de proteína; 0,4 gramos de lípidos y de fibra y 53,2 de carbohidratos; mientras que el integral brinda 219 calorías por porción, 4,5 gramos de proteínas y 45,9 gramos de hidratos de carbono.

El arroz es rico en carbohidratos y por ello no debe abusarse de su ingesta. | Foto: Yagi Studio/Getty Images

Frente al consumo de este alimento se tejen todo tipo de teorías en torno a si debe incluirse en la dieta o no, debido a su riqueza en carbohidratos y el aporte de calorías; pero es importante tener en cuenta que sus beneficios o efectos en el cuerpo dependerán de la forma en la que se cocine y también la cantidad que se consuma.

¿Cómo cocinarlo?

Un aspecto a tener en cuenta es que cereales como el arroz contienen importantes cantidades de almidón, pero también que el cuerpo no absorbe todo el almidón de la misma manera y por ello la forma en que se prepare este alimento toma protagonismo.

Según una publicación del medio Business Insider, desde el punto de vista nutricional, existen dos tipos de almidón: el digerible, que se convierte en glucosa en el estómago y, por tanto engorda, si no se quema; y el resistente, que pasa al intestino y actúa como fibra, aportando un bajo contenido calórico y los beneficios de la fibra en materia digestiva.

El arroz integral es una de las mejores opciones de consumo de este cereal. | Foto: Getty Images

Frente a este tema y a cómo se debe cocinar este alimento para reducir la cantidad de calorías, científicos del College of Chemical Sciences en Colombo, Sri Lanka, descubrieron un método de preparación del arroz que permite aumentar la proporción del almidón resistente.

Para conseguirlo, siempre se debe lavar primero el arroz. De esta forma, se retira el exceso de almidón de la parte superficial del grano. Además, esto también ayuda a que esté más suelto después de cocinarlo. Para lavarlo, la recomendación es hacerlo en agua tibia y remover los granos con la mano, realizando movimientos circulares. La idea es cambiar el agua varias veces antes de poner a cocinar el cereal.

Una vez el arroz esté suficientemente limpio, se debe cubrir con agua y añadir una cucharada de aceite de coco por cada media taza de arroz. Si bien los tiempos de cocción pueden variar, de acuerdo con los gustos de cada persona, la recomendación de los científicos es cocinar a fuego rápido durante 25 minutos o más lento por 40 minutos.

Para reducir sus calorías el arroz puede meterse en la nevera por 12 horas luego de cocinado. | Foto: whitewish

Posteriormente, según el análisis y de acuerdo con una publicación del diario La Razón, de España, se mete en la nevera durante 12 horas y luego sí se consume. “Al enfriar el arroz después de cocinarlo y agregar el aceite de coco durante la cocción se aumenta hasta 10 veces la proporción de almidón resistente a las enzimas digestivas del intestino, lo que reduce el número de calorías que el cuerpo obtiene de la ingesta de arroz”, precisa la citada fuente.

Según Business Insider, los investigadores probaron ocho formas distintas de cocinar las 38 variedades de arroz que hay en Sri Lanka, y después midieron químicamente las calorías. Una de las principales conclusiones fue que al añadir el aceite de coco y dejar enfriar el arroz antes de consumirlo, se reducían un 15 % las calorías en la variedad con menos almidón. La que tenía más almidón lo hacía entre un 50 y un 60 %.